Los planes del 2020 se vieron frustrados cuando en marzo de aquel año se confirmó la presencia del COVID-19 en Ecuador. Muchos de los objetivos que nos planteamos como estudiar maestrías, especializaciones o cursos que aporten a nuestros conocimientos tuvieron que ponerse en pausa.
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Para ello se planeaba ahorrar o presupuestar las cuotas de tal gasto. Sin embargo, en muchos casos se quedó como un plan en espera, pues la reducción del salario, el aumento del desempleo, la salud, los nuevos gastos y otros factores, dejaron en pausa a ese y otros objetivos.
2021
Vino el 2021, con un poco más de esperanza, pero aún incierto para empezar algunos planes. Este año ha sido, para muchos, de recuperación después de un duro golpe en lo económico, en lo emocional, en la salud.
La luz de esperanza de este 2021 llegó con la vacuna y poco a poco ir retomando la normalidad que nos fue arrebatada de un momento a otro. Aunque no es la normalidad que conocíamos, nos adaptamos a una nueva vida que tiene una mascarilla como bandera, con nuevos hábitos, nuevos pensamientos y valorando lo que antes no lo veíamos con tanta importancia.
Este año, más que dinero o amor, el deseo de todos es salud para levantarnos y con fuerza retomar los objetivos. Cuando empezó la pandemia se veía tan lejos el 2022, pero finalmente ya estamos a poco de empezar un nuevo año, que con agradecimiento se lo recibe, a pesar de los malos ratos vamos saliendo adelante.
Este 2022 puede ser el año de estudiar esa maestría, especialización, diplomado o curso que querías seguir. Después de estos años donde se pudo evaluar nuestras habilidades para reforzarlas y las debilidades para mejorarlas. Detectar las oportunidades, que de seguro, te ayudarán en el mercado laboral o en tus emprendimientos.
En un mundo cada vez más competitivo y tras la pandemia, nuevas carreras como el giro a lo digital “estallaron” y no podemos quedarnos atrás. Llegó la hora de salir de nuestra zona de confort e ir por más.
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Jonatan planea estudiar un curso a mediados del 2022. Lo quería hacer desde el 2020, pero por la pandemia no se atrevió a dar ese paso. Sin embargo, se ha convertido en uno de sus objetivos para este nuevo año.
Aunque existe una teoría que el conocimiento y la creatividad, no necesariamente te lo dan los libros, una maestría, una especialización, un curso, sin duda te brindarán herramientas adicionales para tomar decisiones complejas y ventajas a la hora de competir en el mundo laboral.
Gissela Garzón, Responsable de Atracción de Talento, menciona que cuando estás en proceso de selección te das cuenta de cómo se está manejando el mercado, las empresas, cómo la gente se capacita y las herramientas para poder ampliar tu récord académico.
“Por ejemplo para las empresas públicas es importante tener un título de cuarto nivel para determinar cargos específicos. Por otro lado, si empiezo a reclutar a alguien para un proyecto y su plus es que haya estudiando una herramienta de análisis de datos, esa persona me va a servir porque va a poder involucrarse un poco más que los otros en este proyecto”.
— Gissela Garzón
En los últimos años la demanda por los títulos de cuarto nivel ha aumentado. Si bien hay empresas privadas y cargos que sí necesitan y en otras no es obligatorio, el fortalecer las aptitudes académicas y profesionales de las personas que desean continuar su formación nunca será una mala inversión.
Que ese agradecimiento para recibir el 2022 se convierta en optimismo por hacer nuestros sueños realidad, por cumplir los objetivos que se vieron frustrados, de alcanzar lo que nos propusimos, llegó la hora de invertir en ti y seguir trabajando por nuestros deseos.