La solidaridad y la bondad de los seres humanos no tienen límites ni fronteras. En la República de San Marino una mujer de 51 años lleva tres años de vacaciones pagadas, luego de que su hijo, campeón de motocross Titan, tuvo un grave accidente durante el entrenamiento que lo dejó tetrapléjico.
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En enero de 2019 a Sabrina Guerra le cambió la vida, cuando los médicos le informaron que su hijo Bryan Toccaceli, quien ahora tiene 26 años, quedó paralizado del pecho para abajo incluyendo sus brazos.
El joven necesitaba de asistencia las 24 horas del día por lo que su madre pidió una excedencia en el colegio donde laboraba como cocinera, pero eso no era suficiente para estar con su hijo.
Facebook lo logró
Una amiga Cristina Severi, apasionada de las redes sociales, buscó la forma de ayudar a su amiga. Ideó un premio para una madre ejemplar: el regalo del tiempo.
Severi lanzó la campaña en Facebook para que quien quisiera pudiera donar días libres a su amiga y así poder atender a su hijo en casa.
Las leyes en San Marino permite a los ciudadanos públicos o privados donar sus días de vacaciones no utilizados para permitir que colegas se ocupen de familiares discapacitados.
La respuesta a la campaña fue masiva y Sabrina Guerra logró acumular 1.000 días de vacaciones remuneradas, reseñó la agencia EFE.
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“Nunca me hubiera imaginado esta generosidad. Pensaba que alguno me habría donado algún día, pero no tantos. No puedo creer que tanta gente me lleve en su corazón”, expresa.
Solidaridad hasta el 2022
Sabrina tiene vacaciones acumuladas hasta el próximo 4 de enero de 2022, pero cada seis meses se actualiza su estado laboral y descubre cuántas y quienes son las personas que le han donado sus días libres.
Algunos son sus compañeros de trabajo, profesores de la escuela. Otros son personas desconocidas que prefieren el anonimato.
“Yo sé lo que es esperar que lleguen las vacaciones y estas personas me han regalado sus días. Es emocionante”, dijo agradecida la madre de Toccaceli.
Gracias a los cuidados de su madre, Bryan Toccaceli, se ha recuperado y empezó a trabajar en la agencia de Turismo de San Marino cuatro horas al día, tres días a la semana.
Sabrina también cuenta con la ayuda de los servicios domiciliarios para lavar y asistir a su hijo.
