Un golpe aparentemente leve en el dedo del pie llevó a Paul Angliss, un residente de Stoke Newington, Londres, a descubrir que padecía un grave cáncer de sangre que había estado debilitando su salud sin que él lo supiera.
¿Cómo se enteró de su enfermedad?
La historia comenzó durante unas vacaciones familiares en Japón en octubre de 2024. Angliss, de 62 años, empezó a experimentar dolor lumbar intenso mientras ascendía el Monte Fuji. Aunque inicialmente atribuyó el malestar a su edad, la situación empeoró semanas después, cuando un golpe accidental con una silla en su dormitorio provocó una “onda de choque” de dolor que recorrió su columna, lo que resultó en la fractura de la tercera vértebra cervical (C3).
Este episodio, que parecía un incidente menor, desencadenó una serie de pruebas médicas, y fue en este proceso donde Angliss recibió el diagnóstico de mieloma múltiple, un tipo de cáncer de sangre.
Trasplante y recuperación
En abril de 2025, Angliss recibió un trasplante de células madre como parte de su tratamiento. Más tarde, el 15 de septiembre, comenzó a participar en un ensayo clínico, el cual incluyó una biopsia de médula ósea, un procedimiento que describió como “realmente doloroso”.
El desenlace de su tratamiento fue bueno, ya que, en septiembre de 2025, los médicos le informaron que ya estaba libre de cáncer.
Tras una nueva biopsia, el 13 de octubre, recibió el alta médica, marcando el fin de su tratamiento y el inicio de su recuperación.
Conciencia y prestar atención a los síntomas
Angliss ahora está comprometido en crear conciencia sobre esta enfermedad y aconseja a quienes experimenten dolores de espalda sin explicación alguna que busquen atención médica de inmediato.