En la Biblia existen un sinfín de narrativas y textos sagrados que son venerados por millones de creyentes en todo el mundo. Hablamos de un compendio de enseñanzas, historias y leyes que son parte de la cultura occidental, y que han trascendido por siglos hasta nuestros días. Uno de estos textos es el relativo a la “Batalla de los Ángeles de Dios”, un término que evoca la imagen de un conflicto celestial, donde las fuerzas lideradas por figuras como el Arcángel Miguel, enfrentan a entidades malignas o rebeldes en una lucha por el orden y la pureza del universo.
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Pues bien. Recientemente, arqueólogos confirmaron la ubicación de un campo militar mencionado en la Biblia como escenario de la “Batalla de los Ángeles de Dios” contra el ejército Asirio, un hallazgo que sacudió a la comunidad católica y que fue liderado por el arqueólogo Stephen Compton con el apoyo de tecnología avanzada.
La real “Batalla de los Ángeles de Dios”
Aquel sitio, clave en la historia bíblica hace 2700 años, fue escenario de un milagroso evento descrito en las escrituras donde un ángel enviado por Dios aniquiló a 185.000 soldados asirios, protegiendo las puertas de Jerusalén. En tanto, Israel, conocido por su rica herencia cultural y arqueológica, fue justamente el foco de investigaciones que arrojaron luz sobre este episodio histórico y bíblico.
De acuerdo a los trascendidos, la identificación del campo se logró mediante el análisis de una placa de arcilla de la época del rey Senaquerib, hallada previamente, que detalla la disposición del ejército asirio durante la batalla. Compton utilizó comparaciones de cartografía moderna y fotografías antiguas de la zona para localizar con precisión el sitio.
Así, el estudio también reveló que, tras el evento bíblico, la zona no fue habitada por humanos en más de 2600 años, lo que sugiere una posible reverencia histórica o un efecto residual del acontecimiento descrito. Los fragmentos de cerámica y restos de un muro perimetral encontrados en el lugar corroboraron la antigüedad y la naturaleza militar del sitio, según los investigadores.
Con todo, esta investigación confirma detalles narrados en la Biblia, pero también proporciona una nueva herramienta para arqueólogos que buscan entender mejor la expansión asiria y su impacto en la región. O dicho de otra forma, este hallazgo es significativo tanto para creyentes como para historiadores y arqueólogos interesados en las antiguas civilizaciones del Cercano Oriente.
Aunque las interpretaciones varían ampliamente según las creencias y las denominaciones, la batalla simboliza generalmente el triunfo del bien sobre el mal y la protección divina contra las fuerzas oscuras. ¿Qué pasará luego de este descubrimiento? eso es algo que sólo el tiempo dirá.
