Aunque todos los días son ideales para regalarle una flor a mamá, el Día de las Madres es una fecha que no se puede pasar por alto pues muchas progenitoras esperan ser agasajadas con este detalle.
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Las especies son infinitas y todas son muestra del cariño que sentimos por ella, pero una de las más especiales para regalar en este día es la Adenium obesum, mejor conocida como rosa del desierto.
Las razones para regalar la rosa del desierto el Día de las Madres
También llamada rosa de invierno, la especie de la familia Apocynaceae no solo es decorativa y capaz de dar vida a cualquier lugar, sus flores son sumamente hermosas y tienen una gran durabilidad.
Los tonos de esta flor son varios, desde el clásico rosa fuerte, pasando por el amarillo hasta el violeta y rojo. Por lo tanto, puedes elegirla del tono que más guste a tu mamá para fascinarla totalmente.
La floración se da principalmente en primavera y verano, pero sus flores pueden admirarse durante todas las épocas. Por esto, se trata de un regalo perfecto para darle a una mamá en su día especial.
Pero, eso no es todo. La rosa del desierto también atrae buena fortuna, abundancia y prosperidad, según el feng shui. Por eso, cuando sus flores brotan, tus espacios se colman de riquezas y suerte.
Su tallo aparte representa la fertilidad y exuberancia, por lo que se debe procurar mantenerlo con un buen grosor para que no falte nada de esto en nuestro hogar y la buena suerte llene la vida.
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Los cuidados que amerita la rosa del desierto para florecer
Lo mejor de la rosa del desierto es que amerita pocos cuidados para vivir. Eso sí, tales requerimientos concretos deben cumplirse si se quiere mantenerla muy bonita y siempre floreada.
Tales como una correcta iluminación, un paso fundamental para que crezca y brote sus flores sin importar la temporada. Por eso, se debe poner en un sitio donde esté expuesta a la luz solar directa.