Cuando se trata sobre los cambios corporales que sufren las personas durante todo el transitar de la vida sin duda alguna las mujeres se quedan con el premio, sin embargo, a pesar de ser ley de vida y al ser muchos de ellos tan drásticos, son millones las que preferirían que nunca sucedieran.
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Para resumirlo, desde la adolescencia se comienza el largo proceso de menstruación y en la adultez, aproximadamente a la edad de los 50 todo termina en el momento de la menopausia, así se haya sido mamá o no.
La menopausia viene acompañada con importantes cambios hormonales que se expresan notablemente a nivel emocional, pero también existen síntomas físicos como sofocos, dificultad para conciliar el sueño, mareos y debilidad en los huesos, entre otros. El gran tema también radica en que muchas veces los síntomas son tan variados que no se acostumbran a relacionarlos directamente con ella y así es el ejemplo de la caída del cabello.
Pérdida de cabello en la menopausia
Marta Sánchez-Dehesa, doctora de la ciudad de Toledo, España, explica que “la pérdida de cabello femenino es muy común y aumenta con la edad, variando según los grupos étnicos, aunque puede suceder a cualquier edad, la condición ocurre más comúnmente después de la menopausia”
Las causas para que se genere la caída capilar en esta etapa de vida femenina se deben a que los ovarios dejan de producir estrógeno y progesterona, características super negativas para el cabello ya que el estrógeno ejerce un papel protector mantener siempre el pelo en la fase de crecimiento.
“Una caída de hasta 150 cabellos al día se considera normal. Una caída mayor que esto mantenida durante un tiempo de hasta 6 meses podemos considerarla efluvio telógeno agudo (una alteración del crecimiento del pelo que se suele manifestar con una caída difusa). Si la caída se mantiene durante un tiempo superior, deberíamos acudir al dermatólogo”, indica la especialista española al medio Bienestar.
Tratamientos
“Lo ideal es hacer un tratamiento combinado por dentro y por fuera. Es decir, complementar el tratamiento tópico específico anticaída que decidamos utilizar (idealmente champú y loción para que tengamos una efectividad mayor) con un complemento alimenticio que nos aporte todos los nutrientes esenciales para la formación del cabello “, concluye la farmacéutica Estíbaliz Lancha.