Siguen rodando las malas noticias sobre Ezra Miller. El actor de The Flash se encuentra atravesando un mal momento por varios meses ya, después de ser detenido por un altercado en un bar en Hawái, luego fue acusado de retener a una menor y corromperla al proporcionarle drogas y ahora tiene una orden de alejamiento de un niño de 12 años.
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Según The Daily Beast, una madre y su hijo de 12 años recibieron una orden temporal de prevención de acoso contra Ezra Miller ya que los amenazó a ellos y a un vecino. Además acusan a la estrella de cine de actuar de manera inapropiada contra el menor.
De acuerdo con el medio citado, el 2 de febrero, Ezra Miller, el joven y su madre estaban pasando un tiempo juntos, cuando la mujer mencionó viajar con “su tribu”. Esto provocó que el actor se alterara porque la acusó de apropiación cultural y después continuó muy enfadado diciendo que el “parchís” tiene raíces rastafari. El vecino preguntó de qué estaba hablando y así recordó lo sucedido: “Él explotó y comenzó a gritar directamente en mi cara. Dijo: Ni siquiera sabes de qué estás hablando. ¿Qué me dijiste? ¡¿Qué me acabas de decir?!”
El testigo continua, alegando que Miller “luego abrió su chaqueta, tenían esta, como, una gran chaqueta de sherpa, y abrió un lado de su chaqueta, se podía ver un arma, y dijo: Hablar así podría meterte en una verdadera situación grave”.
Una historia extraña
Según las fuentes, el actor de 29 años afirmó en ese momento tener poder sobre el niño y cuando la mujer que vestía de gótica se interpuso, la estrella de cine dijo: “¿Quieres beber mi sangre? ¿¡Sí!?”
En ese momento, el actor se aproximó al niño y comenzó a molestarlo con cumplidos, acercándose a su silla y lo abrazó incómodamente mientras le tocaba sus caderas. Luego le pidió que le siguiera en su Instagram y sugirió que le compraría varios caballos para que lo visitara en su granja de Vermont.
“Automáticamente se sintió extrañamente atraído por mí y siguió hablando de cómo les encantaba mi atuendo y mi estilo, y seguía hablando y hablando de lo genial que era”, contó el mismo niño en una entrevista. “Fue realmente incómodo. Estaba muy nervioso. Tenía miedo de estar cerca de él después de que le gritó a mi madre y ella estaba llorando”.