Un verdadero bombazo en el mundo de los videojuegos ha ocurrido este martes 18 de enero. Microsoft ha comprado los derechos de Activision Blizzard. El monto cancelado por la empresa fue de 68.700 millones de dólares para hacerse con franquicias de la talla de Call of Duty, Diablo, World of Warcraft, Crash y Tony Hawk’s.

Aunque falta la confirmación de la compra por parte de los organismos pertinentes, esta acelera el crecimiento de los juegos de Microsoft en móviles, PC, consolas y permitirá dar los primeros pasos para el metaverso.

¿Cómo se dio la transacción?

Microsoft pagó USD 95 por acción. Una vez que se oficialice esta transacción, Microsoft, se convertirá en la tercera empresa de videojuegos más grande del mundo; Sony y Tencent ocupan los primeros lugares.

Actualmente, el emporio tecnológico cuenta con los derechos de Digital Legends, Activision, Blizzard y King. Es decir, títulos como Overwatch, Candy Crush, Doom y The Elder Scrolls serían totalmente de su propiedad.

Los mismos títulos estarán disponibles en el próximo Game pass. No obstante, aún no se ha confirmado que estos títulos sean exclusivos de Pc y Xbox; especialistas apuntan que sí se cumpliría esta segmentación para otra consolas.

“Tras el cierre, Microsoft contará con 30 estudios internos de desarrollo de juegos, junto con capacidades adicionales de publicación y producción de esports”, afirman desde Microsoft.

Se espera que la operación se cierre en el año fiscal 2023 (que termina en junio de 2023), así que habrá que esperar hasta entonces. Mientras tanto, ambas empresas seguirán funcionando de forma independiente.