La centenaria Banda de Músicos del Gremio de los Albañiles de Quito presentan un repertorio festivo que recopila música inscrita en el corazón de la identidad ecuatoriana. Esta propuesta despierta esa quiteñidad en una celebración por los 487 años de Fundación de Quito y los 100 años de la banda. En esta fiesta estará el reconocido cantante Carlos Grijalva y la fabulosa danza del grupo Somos Cultura Viva. Una fiesta con 40 artistas en escena.
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La cita será el viernes 3 de diciembre a las 19:00 en Teatro Nacional de la Casa de la Cultura. La entrada cuesta 5 dólares.
Banda de Músicos del Gremio de Albañiles
Fundada en 1921, la Banda del Gremio de Albañiles recoge las tradiciones musicales de los barrios de Quito. Y aunque ya no son albañiles sus integrantes, la Banda agrupa a varias generaciones de familias dedicadas a la música y a los sones andinos. En este año, la Banda de Músicos del gremio de albañiles cumple 100 años. Según el investigador y director musical de la Banda, Estuardo Rivadeneira, es incluso más antigua que la Banda Municipal.
El bisabuelo de Fabián Chinchero Pillajo, director musical y clarinetista fue el precursor de la Banda y fue quien inició la tradición de los Pillajo en esta banda popular. Atrás, en los últimos escalones del escenario están los percusionistas de la Banda y dos de ellos son los hermanos Pillajo, que iniciaron desde niños y llevan décadas en la Banda. Los Pillajo ya van por la cuarta generación de músicos que siguen creyendo en la música popular. Otro de los músicos que lleva años en la banda es Luis Antonio Guaillaguamán. Desde 1969 tocó con los Pillajo en lugares de toda la ciudad. Para él, hoy es un homenaje a su compañero de vida, que falleció en marzo.
Por toda esa tradición, Rivadeneira se juntó con algunos músicos y rescataron algunas partituras de los orígenes de la banda en los años 20, 30 y hasta la era moderna. Siguen tocando algunas partituras rescatadas de su fundación, un recorrido por San Juanitos, Paso Doble, Píllaro Viejo, Cumbias Ecuatorianas y Pasillos Clásicos.
CARLOS GRIJALVA
Músico-cantor ecuatoriano (desde 1998) que encuentra su lugar en la música ecuatoriana. Apasionado de la cultura del Ecuador, recorre su geografía para entender a su gente. Viajante trabajador de la música ha vivido en Buenos Aires-Argentina donde se abrió puertas importantes para sus presentaciones, con destacados músicos del país que lo recibió. Las críticas y espacios de difusión en los medios de comunicación, en todos los lugares donde ha actuado, afirman que es una de las figuras más destacadas de la música ecuatoriana en los últimos tiempos.
Asiduo invitado en varias ediciones en diversos festivales como: 45vo Festival Mono Núñez en Colombia, VI Festival Musical Internacional Virtual de Caldas en Colombia, Festival Homenaje, “Déjame que te cante Chabuca” en Merida- Yucatán en México, 4to Festival Festival Internacional de Música de Alturas FIMA en Perú, Festival Homenaje a las Marías en Otavalo, Feria Quitumbe en Quito, Festival del Pasacalle en el Coliseo Rumiñahui y Festival en el Parque Bicentenario. Ha puesto en escena su trabajo junto a agrupaciones del más alto prestigio local y nacional, como: las Orquestas Sinfónicas Nacional y de Guayaquil, Orquesta de Instrumentos Andinos, Banda Sinfónica del Municipio de Quito, entre otros. Así mismo compartió escenario con estrellas de la talla internacional como: Orquesta Buena Vista Social Club, Diego “El Cigala”, Cecilia Todd, Segundo Rosero, Paulina Tamayo, Los Reales, Paulina Aguirre, Hermanos Núñez, Quimera, Margarita Laso, Juan Fernando Velasco, entre otros.
Este artista, cantante, investigador y compositor hoy representa una nueva forma de acercamiento a las músicas del Ecuador y por tal razón hoy es referente para las nuevas generaciones no solo en el canto si no en la responsabilidad de su acercamiento. Tiene en su proyecto EnClave Ecuador que consiste en su vinculación a las diversas culturas del Ecuador a través de la MÚSICA, lo cual le plantea un nuevo reto dentro de lo ecuatoriano. Esto le ha permitido hacer varias composiciones de música con ritmos tradicionales ecuatorianos, pero con su estilo y letra del mundo actual. Su pasillo “El Abrazo” es parte de la banda sonora de la película de Sebastián Cordero “Sin muertos no hay Carnaval” y su sanjuanito “A Octavas” ha sido bailado y tocado en las fiestas de Cayambe. Ganó el Premio Sayce 2020 para componer tres nuevos temas ecuatorianos.
