El exitoso programa de Netflix “El juego del calamar” (Squid Game) puede centrarse en juegos populares para niños pero en un nivel mortal. Esto ha despertado una gran preocupación por la violencia que hay detrás y la exposición que los niños tienen a ésta.
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Con Halloween a la vuelta de la esquina, muchas personas han optado por disfrazarse de los famosos agentes asesinos que se encargan de supervisar el juego. Y aunque es parte de la diversión, se ha pedido que los niños no sean involucrados.
Al menos tres escuelas primarias en Nueva York han prohibido los disfraces de estos personajes debido a los “mensajes violentos alineados con el disfraz”, según dijo el superintendente del distrito escolar de Fayetteville-Manlius, Dr. Craig Tice, a USA TODAY.
“Sería inapropiado que cualquier estudiante usara en la escuela un disfraz de Halloween de este programa debido a los posibles mensajes violentos alineados con el disfraz”, dijo Tice en un comunicado enviado por correo electrónico, agregando que el programa está “destinado a audiencias maduras”.
En Netflix, el programa tiene una calificación de TV-MA, por su uso del lenguaje, la violencia, el sexo, la desnudez, el suicidio y el tabaquismo. Esto significa que puede no ser adecuado para adolescentes menores de 17 años. Y sin embargo, el programa sí ha llegado a los más jóvenes.
Los médicos del Child Mind Institute, una organización sin fines de lucro dedicada a la salud mental de los niños, recomiendan que los menores no vean el show, ni siquiera si son acompañados de un adulto.
“El nivel de violencia es espantoso, más que en la mayoría de los programas. Es un festival de asesinatos con la premisa de que de más de 400 participantes, solo puede haber un sobreviviente”, afirmó David Anderson, director de Programas Escolares y Comunitarios del Child Mind Institute, en un comunicado.
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Common Sense Media, que califica programas y películas según la edad, calificó la violencia en el programa como “muy intensa”.
“Los personajes son torturados y asesinados sistemáticamente por el placer sádico de un maestro del juego. Los adultos tienen relaciones sexuales y hay amenazas de violencia sexual: las mujeres son agarradas por el pelo y golpeadas. Los temas relacionados con los altibajos que uno obtiene al apostar, ganar o estafar dinero son un enfoque principal”, señala el sitio web.
Las escuelas en Estados Unidos y otras países han emitido advertencias para los padres sobre el contenido del programa y que cuiden lo que dejan ver a sus hijos ya que aunque se puede restringir las cuentas en la plataforma, las redes sociales están plagadas de videos sobre el tema.
“En este programa hay asesinatos masivos, torturas y escenas de carácter sexual”, escribió la escuela en Facebook. “Está clasificado como hiperviolento y definitivamente no es apropiado para que los niños de primaria lo vean”.
En la ciudad de Panamá, Florida, los colegios emitieron una declaración muy contundente: “Algunos niños intentan reproducir escenas de programas en la escuela, pero lo que suena inofensivo (¿quién no jugó a Red Light / Green Light cuando era niño?) No es realmente inofensivo porque el juego en el programa de televisión incluye” eliminación “(muerte) y estamos viendo a niños tratando de lastimarse unos a otros en nombre de este ‘juego’ “, dijo el distrito. “No queremos que nadie salga lastimado y no queremos generar recomendaciones disciplinarias para los estudiantes que realmente no entienden lo que están recreando”.
En algunos casos, las escuelas han tomado medidas drásticas como el prohibir incluso que los alumnos hablen del programa o simulen los juegos.
En Inglaterra, también se ha encendido la alerta. El equipo de protección de la educación del consejo de Central Bedfordshire recomendó a los padres que no permitieran que sus hijos vieran el programa después de los informes de que los niños estaban copiando los juegos del programa, según The Guardian.
En Irlanda y España también han prohibido los disfraces de “Squid Game”, según informó la CBS New York.