Los sectores productivos, industriales y comerciales del Ecuador, comprometidos con una economía formal, competitiva y sostenible, respaldamos acciones que permitan restablecer el equilibrio en las condiciones de mercado, con el objetivo de fortalecer la producción nacional y el empleo digno.
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En este marco, la reciente medida sobre la aplicación de aranceles a los paquetes que ingresan al país bajo el régimen 4x4 constituye un paso necesario para enfrentar una distorsión creciente que ha debilitado al comercio formal. Este régimen, originalmente diseñado para facilitar el envío de paquetes personales desde el exterior, ha sido utilizado para operaciones comerciales que evaden regulaciones, impuestos y controles técnicos.
Las cifras muestran una realidad preocupante. En 2024 ingresaron al país más de 6,8 millones de paquetes bajo esta modalidad, con un valor FOB de 502 millones de dólares, lo que representa un incremento del 91% respecto al año anterior. Solo el 4,3% de estos envíos fueron realizados por migrantes, lo que evidencia el desvío del régimen hacia fines comerciales. En el primer trimestre de 2025, esta tendencia se intensificó: el volumen de paquetes creció 153% y el valor FOB alcanzó los 165 millones de dólares.
Queremos subrayar que esta preocupación no se dirige hacia los productos importados legalmente, sino al uso masivo e informal de un mecanismo que fue concebido con otro propósito. Esta práctica genera un entorno de competencia desigual, afectando al comercio y la industria que cumplen con las normas tributarias, sanitarias y técnicas del país, y que son los principales generadores de empleo formal en el Ecuador.
La pérdida de competitividad frente a productos que no cumplen con las mismas obligaciones fiscales ni normativas pone en riesgo miles de plazas de trabajo en sectores que han demostrado ser pilares de la economía nacional.
Consideramos que esta acción del Gobierno Nacional debe formar parte de una estrategia integral para fortalecer la producción formal, fomentar la inversión nacional, generar empleo e incentivar un consumo responsable. Solo así se podrá garantizar un entorno económico justo , sostenible para todos los ecuatorianos.
Reiteramos nuestra disposición a contribuir desde el conocimiento técnico y el diálogo público-privado a la construcción de políticas que impulsen el desarrollo productivo, el empleo de calidad y la equidad en el comercio.
