La publicidad -«English for beginners», inglés para principiantes- se viralizó y tuvo millones de visualizaciones.
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Los dos minutos y medio del vídeo se desarrollan en un perfecto equilibrio entre ternura y humor. El protagonista es un hombre jubilado que compra un curso para aprender inglés; luego se lo ve practicando el idioma durante todo el día y todos los momentos -hasta en la ducha-, ayudándose con papelitos en los que escribe los nombres de las palabras que va aprendiendo.
Pero aún queda una pregunta sin responder: ¿por qué tanto empeño en aprender inglés? La respuesta está en el conmovedor final de la publicidad.
Con información de Infobae
