Panta Petrovic lleva 20 años en una cueva e incluso él, en su aparente soledad y vida de ermitaño, ha llegado enterarse de la pandemia de la covid-19. Ante el problema que representa este virus, el hombre ha tomado la decisión de inocularse.
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A sus 70 años vive aislado del mundo tal y como se lo conoce pero aprovechó esta oportunidad (vacunarse) para instar a otras personas a hacerlo. Para él, es la única solución para salir de esta pandemia que aqueja al mundo.
Según reporta IFLScience, Panta dejó todo su dinero a la ciudad para que construyan tres puentes. Actualmente, vive en una cueva con heno como cama y sus animales como la única compañía.
Debido a un percance que tuvo con algunos lobos, tuvo que bajar al poblado de su localidad para abastecerse y fue ahí cuando se enteró por lo que estaba atravesando el mundo.
Va por las tres dosis
Petrovic ya ha recibido la primera dosis del coronavirus. Y se ha mostrado crítico con los antivacunas; ya que «no entiende el alboroto» que se ha generado alrededor ello. Además, ya ha dicho que él quiere todas las dosis: «Quiero recibir las tres dosis, incluida la extra», comenta en France24. «Insto a todos los ciudadanos a que se vacunen, a todos y cada uno de ellos».
A pesar de su distanciamiento social, el cual no ejecuta ya por dos décadas, es consciente de lo importante que es superar esta pandemia juntos. El serbio ha servido de ejemplo de que las teorías conspirativas no hacen más que dañar a la población mundial y que la vacuna es el único camino para retornar a la normalidad.
