El actual mandatario Guillermo Lasso al igual que el expresidente Lenín Moreno han señalado que este último tuvo incidencia en la victoria del representante de CREO en los pasados comicios electorales. Los dos políticos han tachado que otras variables incidieron en el proceso democrático en el participaron millones de ecuatorianos.
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Moreno, este domingo 20 de junio, publicó un artículo de opinión en el Diario de las Américas (EE.UU.) para referirse cómo llegó a la presidencia y cuáles fueron los factores para que Lasso triunfe sobre Andrés Arauz. En primera instancia, el mandatario apunto que no tuvo nada que ver en la decisión del pasado proceso electoral.
“Se me atribuye, lo que no es verdad, haber sido quien posibilitó este triunfo. Una visión demasiado generosa. Sinceramente, hubo varios factores que intervinieron”.
Para el expresidente de Alianza PAIS la persecución a opositores políticos, muertes nunca aclaradas, la falta de independencia de las funciones, autoritarismo, entre otras, fueron las causales de la derrota del correísmo.
Indicó que la vigencia en el poder de Rafael Correa y el constante apoyo del pueblo ecuatoriano se podría relacionar al “síndrome de Estocolmo”. Se define como un trastorno psicólogico temporal que aparece en la persona que ha sido secuestrada y que consiste en mostrarse comprensivo y benevolente con la conducta de sus victimarios.
A lo largo de su publicación apunta y reafirma que nunca estuvo en sus planes llegar a la vicepresidencia y presidente del país, respectivamente. Respecto a su “traición” a Correa, aclaró que durante una reunión en Ginebra el líder de la revolución Ciudadana habría comentado que respetaría las decisiones de Moreno.
Lenín Moreno, en su artículo “De cómo el Ecuador evitó ser Venezuela”, recalcó que la mesa no estuvo servida y que la situación en la encontró al país fue de pavor. Aprovechó también para citar una frase del celebre libro del Señor de los Anillos/ La Comunidad del Anillo.
«Tolkien en su saga del Señor de los Anillos dice: ‘Saurón, el líder maléfico, siguió el camino de todos los tiranos, comenzó siendo bueno'». El expresidente la uso cómo metáfora de los primeros años del correísmo.