El volcán Reventador, ubicado en la Amazonía, emitió en las últimas horas flujos piroclásticos por el flanco occidental-sur. Así lo informó el Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional este martes 29 de septiembre.
El IG informó que a las 06:04 sus cámaras permitieron observar la ocurrencia de los flujos piroclásticos, alcanzando distancias máximas de 600 metros.
“Este fenómeno se restringe al interior de la caldera y ha sido observado en los últimos meses en el volcán”, apuntó.
#IGAlInstante Informativo VOLCÁN REVENTADOR No. 005
— Instituto Geofísico (@IGecuador) September 29, 2020
MARTES, 29 SEPTIEMBRE 2020
En la mañana de hoy, a las 06h04 TL, las cámaras del IGEPN permitieron observar la ocurrencia de flujos piroclásticos por el flanco occidental-sur occidental del volcán https://t.co/4KweqXJlcP
El informe también agrega que se observaron asociadas emisiones de ceniza poco energéticas con dirección al occidente.
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El volcán Reventador de 3.560 metros de altura empezó su proceso eruptivo en 2002 y se caracteriza por generar explosiones, emisiones de gases, ceniza, flujos de lava y lahares.
En el 2002, el Reventador levantó una gran nube de ceniza, que por la dirección del viento llegó hasta a Quito y cubrió varias partes de la capital.
El Reventador está entre los volcanes más activos del país andino junto al Chiles-Cerro Negro (fronterizo con Colombia).
El Tungurahua y Cotopaxi (ambos en el centro andino) tienen poca actividad en los últimos años.
También figura en la lista el volcán Sangay, situado en la Amazonía y en el que el lunes se registraron explosiones, de acuerdo al Instituto Geofísico.
Hace nueve días, ese volcán lanzó grandes cantidades de ceniza que afectaron a seis provincias situadas en los Andes y en la Costa, entre ellas Chimborazo, Bolívar, Guayas, Los Ríos, Manabí y Santa Elena.
La madrugada del pasado 20 de septiembre se visualizó una nube de ceniza de gran tamaño que alcanzó una altura de entre 6 y 10 kilómetros sobre el nivel del cráter del Sangay, señaló entonces el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE).
Un día después, el Gobierno ecuatoriano calculó que la caída de ceniza del volcán Sangay había causado daño en unas 80.000 hectáreas.