En la parada de buses del viejo aeropuerto ubicada en el norte de Quito, Andrés Albán, fedatario de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) pidió al chofer de la unidad Catar que se detuviera para felicitarlo por el servicio que brinda a la ciudadanía.
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Pese a esta experiencia de buen servicio, el malestar por el trabajo de los transportistas se siente en algunos quiteños y ciudadanos que hacen uso del transporte en la Capital.
Ese es el caso de un usuario que prefirió mantenerse en el anonimato. Él se encontraba abordo de un bus de la ruta Marín-Carcelén y no tuvo filtro para hacer escuchar su malestar.
A su parecer los conductores deben ofrecer un «mejor trato a los usuarios (…) les (los choferes) falta ser más amables con usuarios locales y no solo con los turistas».
No es el único caso de insatisfacción con el servicio de transporte en Quito. En la parada del parque La Carolina, en el norte de Quito, Sara Carrión se une a las quejas. Ella esperaba un bus que la trasladara hacia La Marín.
Carrión asegura que el transporte público en Quito «tiene muchas debilidades en el servicio; principalmente en horas pico».
Además, la ciudadana destaca que el trato de los choferes al usuario es de «lo peor». Lo que más le incomoda a la joven estudiante es que «los choferes compiten con sus unidades entre ellos».
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Al igual que Carrión, Fernanda Graterol considera que entre conductores compiten y que no conducen de «forma adecuada ni responsable».
El servicio de transporte público, a su juicio, es incómodo. «Los transportistas meten más gente de lo que es permitido»
¿Qué dice la AMT?
Desde el 7 de septiembre la AMT realiza operativos para que fedatarios (fiscalizadores vestidos de civil) evalúen el servicio que en el transporte público se brinda al usuario.
Según datos de la AMT, desde que se iniciaron los operativos hasta 6 de octubre se han fiscalizado a 2.446 unidades. De esa cifra, 1.370 buses han incumplido con los requerimientos.
Que las puertas del bus vayan cerradas durante el recorrido, que el chofer se detenga en las paradas y evite el ‘correteo’, pero principalmente que se le de un buen trato al usuario son los requerimientos que los fedatarios evalúan, según detalló el director de Fiscalización de la Agencia Metropolitana de Tránsito, Francisco Arauz, durante un operativo realizado el mes pasado.
No solo es un buen trato al usuario
De acuerdo con datos proporcionados por la AMT, en un operativo realizado el 30 de octubre de 2017, hasta las 11:00 los fedatarios detectaron cuatro unidades que incumplieron con uno de los requisitos que están especificados en la parte de arriba para mejorar el servicio.
De ese número, tres circulaban con las puertas abiertas y una dejaba a pasajeros en lugares no permitidos. Es decir, no usaban las paradas para dejar y recibir pasajeros.
¿Multan a los choferes que no cumplen con los requerimientos que se piden en los operativos?
En caso de que los fedatarios detecten alguna falencia durante su recorrido, que aproximademente dura entre 30 y 20 minutos, se le realiza al chofer un informe de incumplimiento y se envía a la Secretaría de Movilidad, según apuntó el el director de Fiscalización de la AMT.
El conductor de la cooperativa Catar, Víctor Hugo Guamán, agradeció a la AMT que se realicen los operativos, pero aprovechó para quejarse de los usuarios del transporte público.
Al parecer del profesional del volante, los usuarios exigen que se hagan paradas improvisadas. Para ello, usan el pito de las puertas de forma desesperada y eso, según él, hace que pare para evitar que suene incesantemente el timbre.
Así como nos educan a los choferes, también tienen que hacerlo con los usuarios. Cuando hay tráfico la gente se desespera y hasta se molesta por salir rápido», dijo.
Guamán asegura que brinda un buen servicio al usuario, pero asegura que tiene colegas que no cumplen con los requisitos que evalúan los fatarios.
Hay que reconocer que sí se ve como choferes prestan un mal servicio, por ejemplo se van por el lado izquierdo y permiten que los pasajeros crucen donde quieran».
La AMT prevé mantener los operativos para mejorar el servicio en el transporte público en beneficio a la comunidad.
En agosto de este año, transportistas de la ciudad realizaron un paro para exigir el incremento del pasaje a 0, 30 centavos de dólar.
Ante ello, el Alcalde de Quito, Mauricio Rodas, habría dicho en rueda de prensa que desde la entidad saben que «la ciudadanía no está satisfecha con la calidad del servicio» y que esa entidad «tampoco lo está».
Rodas, ante eso, dio un plazo para mejorar el servicio que en primera instancia no se cumplió. Ante eso, hubo una prórroga que esta semana se venció y ahora entrará el debate para el incremento de pasaje en Quito.
