La cremación se realiza a través de un horno donde se incinera el cuerpo humano a aproximadamente 900ºC y se los reduce a cenizas. A través de ese proceso se consigue la desintegración total.
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as primeras cremaciones conocidas ocurrieron antes de Cristo en el litoral mediterráneo en la época del neolítico. Hoy, la cremación es una práctica bastante popular y que fue castigada y prohibida en el antiguo Oriente próximo, ya que solo se permitía por necesidad en tiempos de plagas.
Ante esta realidad, aún hoy hay ciertas religiones donde no está permitida la cremación. Los católicos sí la permiten, como la mayor parte de las religiones más grandes del mundo.
“La iglesia aconseja vivamente que se respete la piadosa costumbre de sepultar el cadáver de los difuntos. Sin embargo, no prohíbe la cremación, a no ser que haya sido elegido por razones contrarias a la doctrina cristiana, como que se esté en contra de la resurrección a la que todos estamos llamados”, explica el sacerdote Luis Ayala a RPP.pe.
Además, hoy la cremación, para algunos, es síntoma o señal de distinción social. Sin embargo, suele ser más económica que un entierro tradicional.