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Un ciudadano chino que intentaba volar hacia Pekín, «disfrazo» a su mascota como una hamburguesa, ante la prohibición de las autoridades de que la tortuga sea llevada en el avión.
El sujeto cuyo nombre no fue revelado, quiso hacer pasar al animal en su equipaje con un disfraz de tortuga, pues no quería separase de su mascota.
El animalito fue colocado entre dos panes y envuelto en un papel de una popular cadena de comida rápida.
Como era de esperarse, el equipo técnico del aeropuerto de Guangzhou Baiyun, detectó con los rayos X la presencia del animalito.
Pese a los ruegos del hombre que no deseaba dejar sola a su mascota, finalmente tuvo que dejarla en libertad y embarcarse solo rumbo a Pekín.