Poco duró el proyecto del Billericay Town FC con un grupo de porristas que este año animarían al un club de fútbol semiprofesional de Inglaterra en su objetivo de lograr la promoción a la Football League.
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Hace unas semanas había empezado el trabajo del grupo de mujeres, pero de manera abrupta el presidente del cuadro azul decidió poner fin a la idea porque las jóvenes distraían a los jugadores por ser demasiado sensuales.
Glenn Tamplin tomó la decisión luego de que supo que las porristas comenzaron a tener contacto con los jugadores por la redes sociales y que varias habían intercambiado números telefónicos.
La líder de las animadores, Bekka Batchelor, lamentó la situación y señaló que en el grupo estaba “muy desilusionado”.
“Es una lástima que tengamos un gran equipo para empezar, pero a nadie a quién apoyar”, sentenció en The Sun.