Antes de botar tus zapatos viejos o pasados de moda, toma en cuenta estas opciones para dar un segundo uso que podría hasta ayudar al medio ambiente, según el estado en que se encuentre tu calzado que no te queda o que te dejó de gustar o simplemente porque están muy rotos o viejos.
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Los zapatos suelen ser un dilema, porque creemos que no hay mucho que se pueda sacar de ellos cuando decidimos dejar de usarlos.
Realmente ¡te equivocas! hay muchas cosas que puedes hacer con ellos.
Maceta
Convierte un zapato viejo en una maceta de exterior. Solo asegúrate que tenga buen drenaje.
Recicla
Dona los zapatos que no estén rotos o en pésimas condiciones. Recuerda, también, que es difícil que unos zapatos en la basura no sean encontrados por alguien que pueda necesitarlos, sobre todo si vives en el tercer mundo. Entonces, si los echas a la basura, intenta hacerlo separado de la basura orgánica o la basura sucia. Mételos en una caja o bolsa a parte y, si quieres ir un poco más lejos, deja una nota que diga que son un regalo.
Intenta reparar
Intenta cuidarlos lo más posible (guardarlos en un lugar ventilado, nunca secar en un calentador, limpiarlos). Pero si, por ejemplo, se desgasta la suela, cámbiales la suela.
Si se mojan con la lluvia resiste la tentación de colocarlos junto a calentados, ello arruina la piel y el pegamento.
Cuando huelan un poco mal, introduce en cada uno una fundita de té negro sin usar y déjala allí por algunos días. Luego lava suavemente las plantillas con tu champú y sécalas al sol. También puedes verter un poco de bicarbonato de sodio y dejarlo actuar por el transcurso de la noche, luego retirar.
