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Como sabemos, Pokémon Go aún no está oficialmente disponible en América Latina. Sin embargo, esto no ha impedido que cientos de personas lo descargaran de manera no oficial y provocaran que la fiebre alcanzara también este región del continente americano.
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Pero no sólo en estos países está sucediendo. A decir verdad, la «locura pokémon» está presente todavía más en aquellos países en donde el juego se puede descargar de manera oficial.
Principalmente en Estados Unidos, los jugadores corren por las calles o se reúnen en parques para atrapar pokémon.
Actualmente, Pokémon Go es considerado como el juego móvil más grande en la historia de este país norteamericano, debido a los números que ha generado en descargas y usuarios.
En la galería de imágenes podrán encontrar las fotografías que demuestran esta «locura» alrededor del mundo.
A continuación un ejemplo bastante claro: un joven decide jugarles una broma a los maestros pokémon de Central Park, Nueva York.
«¡Un Dragonite!» gritó entre la multitud, lo que desencadenó que todos salieran corriendo hacia él.
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Dragonite es uno de los pokémon más fuertes y difíciles de atrapar en el juego.
Por su parte, en Japón, decenas de personas corrieron hacia un parque luego de que en redes sociales se esparciera el rumor de que en él se encontraba un Mewtwo, Pokémon legendario que aún nadie ha visto y mucho menos capturado.
Dicho parque lucía saturado de jugadores, sin embargo, tarde se dieron cuenta de que el rumor había sido una broma hecha por un grupo de «trolls».
Aún así, algunos corrieron con suerte y lograron capturar a otros pokémon poco comunes y bastante poderosos como Blastoise, Gyarados y Venusaur, las últimas evoluciones de Squirtle, Magicarp y Bulbasaur, respectivamente.
Afortunadamente, el viaje no fue totalmente en vano.
A pesar de que, como mencionamos más arriba, en Latinoamérica aún no se lanza oficialmente, la locura ya llegó a la región, y seguramente -basándonos en lo que ha pasado en otras partes del mundo-, cuando esto suceda, veremos fenómenos similares por las calles de nuestras ciudades.