Rosie Oliveira, Miss Bumbum, se manifestó contra el acoso sexual y otras formas de «machismo» poco después de ser electa en una fiesta desbordada de acciones inapropiadas.
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Oliveira fue víctima de acoso sexual minutos después de haber sido coronada como la brasileña con las caderas y la cola más exuberantes (Se eso se trata el certamen de belleza conocido como Bumbum).
Oliveira lucía un diminuto bikini invisible en el club nocturno de San Pablo donde se realizó el evento; cuando un hombre, aparentemente alcoholizado, la manoseó violentamente.
Oliveira giró y le estampó un cachetazo al abusador, que demostró perplejidad ante la mirada de otras chicas sonrientes.
Los organizadores del espectáculo enviaron a los agentes de seguridad que con discreción, y energía, impidieron que el incidente pasara a mayores.
Lo que él (acosador) hizo conmigo fue un acto de machismo, y yo quiero combatir esa costumbre, no porque yo sea Miss Bumbum voy a aceptar ese tipo de agresiones», declaró la joven de 28 años, graduada en periodismo, que representó al estado de Amazonas en el concurso.
El jurado escogió a Rosie como la dueña del cetro, mientras las princesas fueron Raísa Barbosa del estado de Acre, en la región amazónica y Jane Ferreira de Pernambuco, provincia del nordeste, zona conocida por sus magníficas playas.
