¿Cómo se inició tu camino en la música?
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Yo quiteño, hijo de amantes de la música, con 7 años inicie con mi carrera con temas tradicionales ecuatorianos. A los 13 comienzo mi recorrido por el Brake Dance que me abrió los ojos a nuevas oportunidades.
Al ingresar a la universidad, cuando tenía 18, decido realizar una recopilación con mis historias, en mis venas corrían los sonidos ecuatorianos y las tonadas afroamericanas, así que decidí presentar un estilo musical romántico pero que tenga un hilo conductor fuerte.
Junto con Ivis Flyes inicié este proyecto que fusiona ideas buenas y lo mejor de la producción. Mi misión era hablar de las cosas cotidianas, sin sonar filósofo, y con el lenguaje del pueblo.
¿Cuánto tiempo tiene este proyecto?
Cerca de cinco años. Hace 4 años presentamos nuestra primera canción y hoy estamos en la promoción de ‘Un brindis por ti’.
¿Qué tema te abrió las puertas?
Considero que fue ‘Eres lo que quiero’. Este tema tiene una particularidad, ya que fue la gente quien lo solicitó en los medios y plataformas musicales a tal punto que los productores se preguntaron por el cantante que los realizó.
Pocos sabían que era ecuatoriano, se dieron rumores, muchos creían que era un artista internacional.
¿Se confundieron, por qué sucedió esto?
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Es un poco la falta de creer en nosotros. Yo trabajo entre Miami, Los Ángeles, Colombia y Ecuador y al presentar un producto tan bien hecho, diferente a lo que estamos acostumbrados, te prestas a que te confundan.
Acá existen muchos músicos de valor que están creando grandes bandas, solo falta exposición y que la gente los escuche.
¿Qué pasó cuando te presentaste como el autor de las canciones?
Fue cómico, yo creo que pasó por que jamás le di un rostro a mis canciones. Al principio tomé la decisión de con mis temas conquistar los corazones de la gente y luego exponerme a la opinión pública, esa creo es la razón por la que nadie me reconocía.
Eres un artista humilde, según tus seguidores ¿Por qué?
Sí, creo que en la vida tienes que ser un gran ser humano y después cualquier tipo de profesional. He pasado por historias bonitas y muy tristes y he aprendido que no debemos derramarnos cuando nos suceda algo.
¿Compartes este aprendizaje con tus seguidores?
Siempre, los artistas somos comunicadores y tenemos una responsabilidad con lo que informamos. Yo soy ingeniero comercial pero mi misión en esta vida es transmitir las cosas buenas que me han pasado, de ahí nace el enganche tan fuerte con los seguidores, ellos saben que a los dos nos han pasado cosas similares.
¿Te ha costado mantener ‘los pies en la tierra’?
Lo he hecho con la misión de ser humilde, no el sentido conceptual, lo hago en el hecho de valorar el tiempo. La fantasía del ego, cuando está encima del talento, te convierte en famoso pero no en querido.
¿Qué proyectos tienes para este año?
Seguir con los veredazos, que es un encuentro con mis seguidores y mi guitarra. A falta de conciertos, no voy a esperar, concreto citas con amigos.
La capital del Ecuador no es paga lo justo a los artistas; en la ciudades pequeñas siempre te quieren ver más.
¿Tienes proyectos internacionales?
Estoy ingresando con mis temas en mercados como México, Chile y Perú. Creo que mi camino por ahora es fortalecerme en mi país y luego continuar con la expansión del proyecto fuera de Ecuador.
¿Siempre ligado al estilo romántico?
Me gusta, pero estoy pensando en un tema más bailable. Yo como artista soy generador de más de 15 plazas de trabajo, es hora de proponer nuevas cosas.
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