Científicos confirman que los lectores de Harry Potter son mejores personas. Según un estudio el haber leído, en la infancia, las historias de Harry Potter podría ser un antecedente de futuros adultos más tolerantes.
PUBLICIDAD
Denominada: «La magia más grande de Harry Potter: reducir el prejuicio» la investigación demuestra que leer los libros de esta saga puede disminuir, por ejemplo, la intolerancia hacia grupos estigmatizados tales como los inmigrantes, los homosexuales y los refugiados.
El estudio ha estado dirigido por el psicólogo Loris Vezzali, que encontró que el personaje de Harry empatiza con individuos de categorías estigmatizadas. Además se esfuerza por comprender su sufrimiento y actúa para que haya igualdad social. Así lo resume Vezzali: «Mis colegas y yo pensamos que ese sentimiento de empatía es un factor clave para reducir los prejuicios».
El equipo de Vezzali realizó dos análisis en alumnos de escuela primaria y secundaria. En el primero, 34 estudiantes de quinto grado completaron cuestionarios sobre su actitud hacia los emigrantes. Después, una vez a la semana durante seis semanas, un investigador se reunió con ellos en pequeños grupos para leer pasajes de Harry Potter y facilitar la discusión con ellos al respecto.
La mitad de los niños escucharon pasajes de la saga que hablaban específicamente de prejuicios, incluido cuando Draco Malfoy llama “sangre sucia” a Hermione Granger. El debate posterior se centró en ese tema y en cómo afectaba a los personajes. La otra mitad de los estudiantes no fueron expuestos a capítulos que abordaran los prejuicios.
Como resultado, los estudiantes que discutieron los pasajes relativos al prejuicio mostraron una mejor actitud hacia los emigrantes.
En el segundo estudio, 117 estudiantes de secundaria respondieron cuántos libros de la saga habían leído, así como el cuestionario sobre su actitud a las personas homosexuales. Una vez más, los chicos que leyeron más libros de Harry Potter, fueron más tolerantes con los gays.
PUBLICIDAD
Vezzali está convencido de que este hallazgo ofrece una importante lección a los profesores. Las actitudes de los más jóvenes son muy maleables. Por ello debería ser una prioridad de los educadores enfrentar un comportamiento prejuicioso a una edad temprana, cuando aún no existe una resistencia al cambio.
El hallazgo viene como anillo al dedo a J.K. Rowling, la autora de los libro, que ha incluido temas liberales y sociales en su saga e incluso ha dicho que siempre pensó en Dumbledore, el maestro de Harry, como alguien gay.