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Era la más elegante de las «Spice Girls», de ahí su apodo de «Posh». Y aunque fue víctima de todos los excesos estilísticos de la década pasada, era fascinante verla ostentando toda su posición de «nueva rica» en su propio reality:
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Su frivolidad, altivez e inconsciencia le granjearon hasta un papel higiénico con su cara. Victoria Beckham era la «WAG» por excelencia. Hasta que un día despertó y se dio cuenta de que servía para algo más que gastar el dinero de su marido.
Y entonces cambió su estilo y se consagró como diseñadora seria.
Y sus vestidos comenzaron a usarlos varias famosas:
Por supuesto, ella también se refinó:
Cosa que también pasó con su cara. Sobre todo sus labios.
En la galería de fotos podrán ver cómo cambió la apariencia de la diseñadora y cómo los tratamientos influyeron para que luzca así.