Uno de los principales asesores de Seguros del Ecuador, Raúl Coka Barriga, compartió con Metro la dinámica del sector de seguros durante el último año de pandemia.
PUBLICIDAD
Rubén Alarcón, Gerente General de Raúl Coka Barriga, explica que al ser un servicio que implica la interacción con el cliente, se encontró la forma de darle continuidad pese a la pandemia y, sobretodo, lograr la fidelización con el cliente.
Un año extraño, ¿cómo fue su reacción ante esta pandemia?
— Fue tan abrupta la novedad de no poder salir, de no poder trabajar, que ciertamente unos estuvieron más preparados que otros en esta realidad tan cambiante que nos ha tocado enfrentar.
Como corredores de seguros, con más de 47 años en el mercado, vendemos un servicio, un intangible, y hace que el reto sea mayor porque esa venta representa una transmisión de confianza que se logra con el contacto con el cliente: uno asegura algo que es necesario pero esperando que el evento de riesgo nunca te suceda. Esa interacción personal desapareció de la noche a la mañana.
El reto fue entender qué mecanismos tecnológicos nos podían dar esa cercanía con el cliente para que sientan que el sector asegurador no está tambaleando por esta situación tan sensible, donde hemos podido ver que muchas compañías han tenido pérdidas importantes por las indemnizaciones en seguros de vida, uno de los factores más críticos que ha traído el Covid.
Nuestra primera misión fue reenfocarnos como equipo de trabajo. Como broker de seguros contamos con 60 personas a nivel nacional, y el primer reto era alinearnos a seguir sirviendo sin necesidad de estar en oficina.
Teníamos que entender el mecanismo y afortunadamente veníamos trabajando con ciertos insumos tecnológicos que nos permitían hacer labores internas de forma remota. Sobre esa base decidimos trabajar con el cliente y darle la continuidad al negocio.
PUBLICIDAD
¿Cómo se organizó el trabajo?
— Realizamos teletrabajo desde el 15 de marzo hasta el 3 de junio, fecha en que cambió el semáforo, y desarrollamos todo un plan de contingencia para hacer un retorno paulatino y controlado. Decidimos implementar el plan piloto por áreas, sobre todo las que son más operativas.
Sin embargo, tuvimos que volver al teletrabajo porque tuvimos casos de contagio pese a las medidas propias de bioseguridad. Pero debíamos dar tranquilidad emocional a las personas y no podíamos hacerlo al insistir en la actividad presencial, sobretodo en los meses cuando se registraban picos de contagio principalmente en Quito. Es por eso que nos mantenemos en teletrabajo pero damos las facilidades para que los colaboradores que quieren hacer el trabajo presencial lo puedan realizar.
¿Cómo afectó la pandemia al sector de seguros?
— Al igual que todos los negocios, es un tema que depende de la situación económica general en la que nos desenvolvemos. Si antes, sobretodo en el área corporativa, se hacían tres revisiones en materia de seguros, ahora son cinco, porque todo merece optimizar las circunstancias presupuestarias y sabemos que en todas las industrias estamos muy exigidos al ahorro, al rendimiento y a resultados, más aún en este 2021 donde tratamos de recuperar el 2020.
La pandemia ha afectado el área de riesgos orientados a personas, seguros de vida, de asistencia médica, de accidentes personales, de viajes, y en el seguro dirigido a colegios y universidades ha influido el cambio de la metodología de la educación. Tuvimos que encontrar mecanismos que equilibren esta nueva realidad para así precautelar que alguien se quede sin seguro.
Hemos visto que el ramo más afectado ha sido el de vida por los fallecimientos producidos por el Covid-19; el de asistencia médica también ha tenido una utilización que se normaliza cada vez más. Lo interesante es hacer reflexionar a nuestros clientes sobre la importancia de continuar con un seguro y encontrar la flexibilidad necesaria probablemente si ya las posibilidades no están como en su momento lo fueron, todo con el afán de darle continuidad. Nuestro mayor reto como negocio fue mantenernos a flote, precautelar al máximo la planilla laboral y buscar que logremos evolucionar juntos. Los clientes han aceptado ese mensaje de continuidad, con una afinidad que nos ha vuelto mucho más cercanos.
¿Qué tipo de seguros ofrecen?
— Comercializamos todos los ramos de seguros: vida, accidentes personales, gastos médicos mayores, pólizas con alcance internacional, patrimoniales, no solo corporativos sino también individuales. Queremos romper ese paradigma de que el seguro puede ser algo prohibitivo o elitista, realmente debe ser parte de nuestra cultura.
Por ejemplo, a raíz de la pandemia se ha hecho más notorio el riesgo cibernético porque nos volcamos a lo digital. Estamos expuestos en transacciones, filtración de base de datos, de archivos de trabajo, donde ahora los hackers han visto una mayor oportunidad. Incluso, volviendo a la “normalidad”, hay muchas compañías que han decidido mantener el teletrabajo porque encontraron ventajas que el Covid nos obligó a verlas. Estos riesgos cibernéticos nos obligan a estar preparados y conocer que existen mecanismos de seguros que nos blindan, para no poner en riesgo nuestro patrimonio o activos.
En Raúl Coka Barriga tenemos la fortaleza de gestionar los riesgos de seguros en 360 grados con la experiencia práctica de ejecutarlo en el día a día.