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Lo que podría haber sido un inocente chapuzón en el mar para terminar un entrenamiento, terminó siendo todo un problema para Tenerife. Es que mientras salían de su baño en la playa Las Teresitas, a Marc Crosas, flamante campeón del equipo, no se le ocurrió nada mejor que tomar los postes para delimitar las canchas y pescar una cría de tiburón.
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El gran lío se generó porque el mediocampista arponeó un angelote, una especie de tiburón ángel que está protegida y se encuentra en peligro de extinción. La acción del volante fue rápidamente cuestionada por todos y la más crítica fue la primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Santa Cruz, Zaida González, quien se lanzó en Twitter contra el club, pese a que pidieron disculpas.
«El CD Tenerife pide disculpas por el desafortunado incidente ocurrido esta mañana en la playa de Las Teresitas y lamenta el daño causado», fue la disculpa pública de Tenerife en su cuenta de Twitter, a los que González respondió rápidamente.
«Terrible noticia, acaban de matar a una cría de Angelote, cuya población se encuentra gravemente diezmada. Las Teresitas es uno de los pocos lugares de cría que existen, las disculpas por esta atroz acción son pocas«, escribió en la red social la primera teniente de alcalde.
Pero no fue la única autoridad que manifestó su enojo y también lo hizo Carlos Correa Correa, concejal medioambiental, sanidad y accesibilidad del ayuntamiento de Santa Cruz, Tenerife. «Vergonzoso. Exigimos disculpa públicas por esto. Abriremos expediente», dijo Correa anunciando que abrirán un expediente para estudiar posibles sanciones al club. Un chapuzón que terminó en pesadilla para Tenerife.
