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El Rostov del ecuatoriano Cristian Noboa, segundo del campeonato ruso, clasificó por primera vez en su historia a la Liga de Campeones y eliminó de toda chance al poderos Zenit San Petersburgo.
El equipo de Noboa derrotó ayer por la mínima al Ural en la penúltima jornada de la liga rusa.
Un golazo de cabeza de Azmun a falta de un cuarto de hora para el final del partido garantizó al equipo del sur de Rusia el segundo puesto y una histórica plaza en la máxima competición continental.
El Zenit del brasileño Hulk no pasó el domingo del empate ante el Lokomotiv Moscú, por lo que lo máximo a lo que puede aspirar el equipo de André Villas-Boas es al tercer lugar, una pobre consolación para el equipo patrocinado por Gazprom.
Esta temporada el Zenit logró clasificarse por segunda vez en su historia para los octavos de final de la “Champions”, donde fue de nuevo eliminado por el bestia negra, el Benfica.
El Rostov, que está dirigido por Kurbán Berdíev y comandado por el central ecuatoriano Cristian Noboa -ambos campeones de liga con el Rubín-, aún mantiene intactas sus esperanzas de lograr el título.
El CSKA, con el que se alternó en el primer puesto durante las últimas semanas, le aventaja sólo en dos puntos tras derrotar al Krasnodar (2-0).
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El equipo del Ejército ruso viaja en la última jornada al estadio del Rubín, un equipo que se encuentra en mitad de la tabla y que ya no se juega nada, al igual que el rival del Rostov, el Térek de Grozni.
Pese a que la diferencia con el líder del torneo es de dos puntos el equipo de Noboa no pierde las esperanzas de alcanzar un victoria en la última fecha y que el CSKA sufra un resbalón, lo que le permitirá alzar la Copa.
