En el norte de Polonia, curas quemaron algunos objetos, entre ellos libros de la saga de Harry Potter, libros escritos por la inglesa J.K Rowlling. Según los líderes religiosos y sus propietarios tenían fuerzas malignas.
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En las fotos se puede ver como un grupo de sacerdotes junto a sus monaguillos reúnen una cantidad de libros y objetos frente a un altar, para luego llevarlos a un patio con una hoguera, la cual encendieron acompañados de algunos niños
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La fundación católica SMS z Nieba publicó fotos de la quema en su página de Facebook, acompañándolas de pasajes bíblicos en los que se condenan «todas las prácticas de magia o de hechicería». Las colecciones de los 11 libros de J.K. Rowling , la saga de Crepúsculo de Stephenie Meyer y una máscara africana fueron algunos de los bienes que se echaron a una hoguera.
Las reacciones
La publicaciones generaron un sin fin de reacciones en los usuarios de Internet, numerosos comentarios criticaron a los sacerdotes por quemar en la hoguera libros. Algunos usuarios observaron que los responsables deberían ser procesados por daño al medio ambiente y contaminación, mientras que otros compararon el acto con algo propio de la Edad Media y la segunda guerra mundial. Algunos usuarios citaban al poeta alemán Heinrich Heine:
«Donde se queman libros se terminan quemando personas”.
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