En Liga de Quito ya se empieza a mirar el 2026 con realismo y sin vueltas. El presidente Isaac Álvarez reconoció públicamente que el club no podrá retener a Bryan Ramírez, uno de los jugadores más importantes del plantel en las últimas temporadas.
El directivo explicó que la institución ya realizó un esfuerzo considerable para mantener al futbolista en un momento clave del proyecto deportivo. “Es un esfuerzo importante que tuvimos que hacer para retenerlo con propuestas reales de clubes brasileños. Ellos enviaron sus ofertas y decidimos en su momento que se quede por la Copa Libertadores”, señaló Álvarez, recordando que Liga de Quito apostó fuerte por su continuidad para afrontar el torneo continental.
La decisión no fue menor: LDU alcanzó las semifinales de la Copa Libertadores, y Ramírez fue una de las piezas que sostuvo el funcionamiento del equipo en el plano internacional. Desde la dirigencia, el mensaje es de gratitud y reconocimiento. “Estamos agradecidos y lo valoramos. Ahora estamos en una situación parecida”, añadió el presidente, dejando entrever que el mercado vuelve a jugar en contra.
Álvarez fue aún más claro al comparar el caso de Ramírez con otras salidas recientes que el club no pudo evitar. “El caso de Bryan se hace igual que Carlos Gruezo (se va a México) y en el pasado lo de Ezequiel Piovi o Jhojan Julio, que no podemos retenerlos, ya es imposible”, sentenció.
En LDU el mensaje es claro y sin maquillaje: el proyecto deportivo compite, se potencia… y luego exporta.
