Los aficionados del Palmeiras no han bajado los brazos tras la contundente derrota 3-0 ante Liga de Quito en la ida de la semifinal de la Copa Libertadores 2025, celebrada el 23 de octubre. A través de redes sociales, los hinchas del Verdão muestran su frustración por el resultado, pero al mismo tiempo insisten en creer en la remontada para el partido de vuelta del próximo 30 de octubre.
Frases contundentes como “Todos somos uno” o “Cuatro-cero en el Allianz” reflejan esa mezcla de autocrítica, esperanza y fanatismo que sigue latente en la hinchada brasileña.
¿Qué dicen los hinchas de Palmeiras tras la goleada?
En foros y plataformas de conversación, seguidores del club manifestaron su descontento pero también su compromiso: “El próximo 30 de octubre será el cotejo de vuelta. Palmeiras es el equipo de turno, Palmeiras es equipo del amor”, planteó un usuario en Twitter. Otro enfatizó:
“Lo difícil es que yo creo, el jueves estaré ahí”.Mientras tanto, un mensaje más optimista rezaba:“Estoy súper tranquilo 4×0 en Allianz”.Y un tercer hincha añadía:“Vamos a luchar hasta el final aquí. Todos somos uno! ¿Dónde está el apoyo mi gente?”.
Este tipo de expresiones reúnen las emociones de una afición que siente la derrota como un golpe duro, pero también como un reto y una oportunidad de demostrar lealtad y fuerza para la revancha.
¿Por qué la hinchada de Palmeiras mantiene la fe en la remontada?
A pesar del marcador adverso, los seguidores confían en la capacidad del equipo para revertir la eliminatoria en su estadio. “TODOS SOMOS UNO. Eso es fútbol, en una semana quedan 90 minutos más! Apoyemos”, escribió otro hincha, apelando a la unidad. El hecho de que el partido de vuelta se juegue el 30 de octubre en Brasil les da una plataforma para imaginar un resultado espectacular.
Además, la identidad del club —“Palmeiras siempre ha sido y será siempre el equipo de vuelta que creo”– es evocado como símbolo de que no se rinden sin pelear. Los medios brasileños señalan que esta fue “la primera derrota en esta competencia” para el Palmeiras, lo que añade presión y al mismo tiempo el argumento de que la serie aún está abierta.
El discurso de su entrenador también enfatizó que quedan 90 minutos largos en casa, lo que refuerza la narrativa de la afición.
En definitiva, el ambiente entre los hinchas del Palmeiras tras el 3-0 en Quito es una combinación de decepción y determinación. Mientras el equipo recopila mensajes de aliento —“Donde está el apoyo mi gente”—, la hinchada se prepara para la revancha con la convicción de que el desenlace aún no está escrito y que, si el Verdão despierta, los 90 minutos del 30 de octubre podrían cambiarlo todo.

