Lo que parecía un partido más terminó siendo una demostración brutal del poder de convocatoria de Boca Juniors, que no solo agotó entradas en tiempo récord, sino que transformó estadios, calles y hasta supermercados en territorio xeneize.
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Boca copó todo: desde el Hard Rock Stadium hasta los malls
La ciudad fue testigo de una invasión masiva de hinchas argentinos. Más de 60.000 aficionados con camisetas, banderas y bombos convirtieron el Hard Rock Stadium en una réplica de La Bombonera. El aliento fue ensordecedor y constante, al punto que hasta jugadores del Bayern Múnich, como Harry Kane, confesaron que “nunca había jugado en un ambiente así”.
Locura viral: cantos en la playa, Walmart y hasta en el metro
La hinchada no solo brilló dentro del estadio. Videos virales mostraron a fanáticos cantando en la playa de South Beach, saltando en estaciones del metro de Miami y hasta organizando una previa en un supermercado Walmart. Uno de ellos confesó entre risas: “Vendí el auto para venir. Esto es Boca, hermano”.
Las redes explotaron con el hashtag #BocaEnMiami
Las imágenes del estadio teñido de azul y oro dominaron TikTok, Instagram y X (Twitter). El gol de Miguel Merentiel ante Bayern Múnich fue gritado como si fuera una final del mundo. El hashtag #BocaEnMiami se posicionó entre los más comentados a nivel global.
Russo: “Esto no se entrena, se siente”
El técnico Miguel Ángel Russo, emocionado tras el partido, fue directo:
“Lo de la gente es increíble. Es imposible no contagiarse. Boca es equipo e hinchada. Esto no se entrena, se siente”.
