El Barça se levantó de la lona tras el revés europeo sufrido contra el Inter de Milán con una exhibición de fútbol en el primer tiempo y resiliencia en el segundo para asestar un golpe casi definitivo a LaLiga ante el Real Madrid (4-3), que, liderado por los tres goles de Kylian Mbappé, desaprovechó una ventaja de dos goles en los primeros minutos del encuentro.
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Con este triunfo en un clásico vibrante, el conjunto de Hansi Flick goza de una ventaja de siete puntos a falta de tres jornadas sobre el equipo de Ancelotti, que terminará la temporada contando por derrotas los cuatro partidos disputados ante el eterno rival (0-4, 2-5, 3-2 y 4-3)
La valentía del equipo azulgrana se impuso a la pegada del Real Madrid en un duelo que tuvo de todo. Se avanzaron los visitantes con dos tantos de Mbappé en el primer cuarto de hora, a los que respondieron los locales con cuatro goles antes del descanso en una media hora de fútbol total.
En el segundo tiempo, el francés redondeó su gran tarde con otro tanto, pero su equipo, que gozó de ocasiones claras para igualar el encuentro, se quedó sin puntuar en Montjuïc. Un resultado que deja LaLiga virtualmente decidida a favor de los azulgrana, un equipo tan explosivo en ataque como endeble en defensa.
Ninguno de los dos entrenadores hizo inventos. Flick salió con los mismos once que se quedaron con la miel en los labios en San Siro, con Gerard Martín y Eric Garcia en los laterales. Ancelotti repitió la convincente fórmula que funcionó en el primer tiempo contra el Celta, manteniendo a Güler, que se situó en la punta derecha del ataque blanco.
Y el partido empezó con los dos bloques siendo fieles a sus virtudes y debilidades. El Barça desinhibido en ataque, insistiendo en la presión, y a la vez endeble en defensa. El Madrid, en cambio, esperaba su momento con la pegada de Mbappé. Y, en este escenario, una montaña rusa se instaló en Montjuïc, la misma que apareció contra el Atlético de Madrid en las semifinales de la Copa del Rey (4-4) y contra el Inter de Milán (3-3).
El Real Madrid copió el inicio que firmaron en el Olímpico Lluís Companys colchoneros e interistas hace pocas semanas. Dos goles marcaron los de Ancelotti antes del primer cuarto de hora. Los dos llevaron la firma de Kylian Mpabbé, una pesadilla para el cuadro barcelonista.
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El primero (min.5) llegó desde los once metros. Cubarsí, con un mal control, dejó solo al ‘9’ blanco y Szczesny, en el mano a mano, le derribó claramente en otra acción inocente del meta polaco que penaliza a su equipo.
El segundo (min.14), tras dos llegadas peligrosas del Barça, fue en una contra letal. Pase con el interior de Vinícius que Mbappé resolvió con clase cruzando el balón. Se quejaron los catalanes por una falta previa a Lamine Yamal que no fue.
La efectividad goleadora del Real Madrid condenaba a un rival tierno atrás que, ni mucho menos, bajó los brazos. Y es que al Barça de Flick no le puedes dar nunca por muerto. Se levantó, otra vez, para firmar 30 minutos espléndidos. Fútbol total para remontar un partido que se le había puesto muy cuesta arriba al líder de LaLiga.
Un vendaval pasó por encima de un Madrid timorato, incapaz de quitarle el balón al conjunto azulgrana, que no paró de insistir, insistir e insistir ofensivamente para anotar cuatro goles antes del descanso.
El hoy lateral Eric Garcia, que también marcó en San Siro, anotó el 2-1 (min.19) con la testa en la salida de un saque de esquina, justo después de que el otro carrilero, Gerard Martín, probara a Courtois con un trallazo potente.
Trece minutos después apareció Lamine Yamal con una rosquita precisa con su zurda prodigiosa que recordó, salvando las distancias, a la que se inventó frente al Inter de Milán. No podía faltar el delantero de Mataró a la cita en su último clásico siendo menor de edad.
Enloquecía el público de Montjuïc, que quería más. Los jugadores de Flick también querían más y casi en la siguiente jugada (3-2, min.34) celebraron el tercero. Se aprovechó Pedri de un choque en la medular entre Mbappé y Ceballos para ponerla al espacio para Raphinha, que superó con un remate raso a Courtois.
El Madrid andaba desnortado, sin respuesta ante el huracán azulgrana, que no cesó en hurgar en la herida de un rival que dejó en evidencia sus carencias defensivas que se evidenciaron en el cuarto tanto de Raphinha antes del descanso (4-2, min.45).
El brasileño robó el balón a Lucas en la zona de tres cuartos. El esférico llegó a Ferran, que le devolvió al inventor de la jugada, que resolvió a placer desde el interior del área.
Antes, el VAR anuló un penalti de De Jong a Mbappé por fuera de juego previo y en la última jugada del primer tiempo tampoco subió un tanto del francés por el mismo motivo.
Buscó soluciones Ancelotti al descanso dando entrada a Modric y Brahim por Güler y Ceballos. Lo agradeció su equipo, que fue más incisivo en la presión y le arrebató en muchos momentos el balón al Barcelona, que esperaba su momento en una transición rápida. En éstas, Lamine Yamal anotó el quinto, aunque no subió al marcador por posición antirreglamentaria.
Se lesionó Cubarsí y entró Christensen en su lugar. Y cuando parecía que los locales tenían el partido controlado, otro error azulgrana propició el ‘hat trick’ de Mbappé. Se enredó el Barça saliendo con el balón que cayó a los pies de Modric. El croata asistió a Vini y este encontró a la estrella blanca, que batió de nuevo a Szczesny (4-3, min.70). Once goles ha marcado ya el internacional galo al Barça, seis con la zamarra del PSG y otros cinco con la del Real Madrid.
El Barça no remató el encuentro -Lamine Yamal y Raphinha rozaron el quinto-, el árbitro y el VAR no vieron unas manos del área de Tchouaméni y el Madrid se lo creyó. El canterano Víctor Muñoz, que hoy debutó con el primer equipo blanco, y Mbappé, en una contra repelida por Szczesny, tuvieron el empate en otra concesión defensiva azulgrana.
El árbitro anuló el gol a Tchouaméni en la salida de un córner por fuera de juego de Mbappé al intentar rematar el balón. Tampoco subió al marcador el tanto de Fermín, por manos del andaluz, pero el Barcelona no lo necesitó para dejar LaLiga vista para sentencia.