El jurado de la V Edición del Premio Nacional de Artes Mariano Aguilera, conformado por Elvira Espejo (Bolivia), Elvis Fuentes (Cuba) y Ana Rodríguez (Ecuador) dio a conocer a los ganadores de este importante galardón, la noche de este 06 de mayo.
PUBLICIDAD
El premio Mariano Aguilera a la Trayectoria Artística se lo otorgó a la fotógrafa María Teresa García (Sangolquí, 1945), quien trabaja con imágenes desde hace más de cinco décadas. Este galardón reconoce a los creadores cuya producción haya sido referente de la escena cultural ecuatoriana durante al menos 20 años.
El reconocimiento para García viene acompañado de un incentivo de USD 40 mil y la producción de una exposición antológica en el Centro de Arte Contemporáneo, con su respectivo catálogo.
El premio Nuevo Mariano, otorga 10 becas de 20 mil dólares para la producción de proyectos de arte contemporáneo. Este reconocimiento se entregó a creadores provenientes de varias provincias del país quienes participaron con propuestas de diversas expresiones culturales en las categorías: Creación artística, Investigación, Prácticas Curatoriales, Nuevas pedagogías del arte, Edición y publicación.
Los premios en el apartado de Creación artística fueron para Alfredo Eduardo Ramírez (Del acero a convertirse en lodo), Blanca Angélica Alomoto (Wakas sagradas. Una reflexión estética y sensible del paisaje), Gonzalo Miguel Vargas (Al fin, perdidos) y María Rosa Jijón (Memorias del hielo).
En la categoría Investigación la ganadora fue Susan Elizabeth Rocha (Espiritualidades expandidas en el arte ecuatoriano 1900 - 2023).
En el apartado Prácticas Curatoriales los triunfadores fueron Tanya Pamela Pazmiño (Fem/o/type. Mujeres ecuatorianas en las prácticas contemporáneas del bioarte y la naturaleza) y Pedro Soler (Tinku urku pacha: Asamblea del suelo).
PUBLICIDAD
En la sección Nuevas pedagogías del arte el galardón se lo llevó María Concepción Fuérez (Fibras del páramo); mientras que en la categoría Edición y Publicación los triunfadores fueron Carolina Alejandra Velasco (La palabra es trazo y el trazo movimiento y el movimiento especulación) e Isadora Romero (Humo, semilla, raíz).
Con más de 100 años de existencia, el Premio Mariano Aguilera, constituye “una plataforma de fomento, promoción y difusión de las prácticas artísticas” contemporáneas producidas en Ecuador, a través de incentivos económicos y materiales, que pretenden contribuir a la transformación permanente de la escena artística local” destacó Paula Jácome, directora de la Fundación Museos de la Ciudad.
La premiación oficial de la V Edición del Premio Nacional de Artes Mariano Aguilera se realizará el próximo 17 de mayo, en una gala en el Centro de Arte Contemporáneo (CAC), a la que asistirán autoridades, artistas y personalidades del ámbito cultural.
Este reconocimiento, considerado el programa más grande de fomento a las artes que mantiene el Municipio de Quito, es entregado por la Fundación Museos de la Ciudad (FMC) y se gestiona y ejecuta a través del Centro de Arte Contemporáneo de Quito (CAC), que es uno de los centros culturales a cargo de la FMC.
Sobre el Premio Nacional de Artes Mariano Aguilera
Este importante Premio surge en 1917, cuando el abogado Mariano Aguilera donó una casa al Consejo Cantonal de Quito (ahora Municipio del Distrito Metropolitano de Quito). La consigna era entregar un premio a las tres mejores obras de arte del año, producto de los arriendos de la casa heredada; así nació el Salón Mariano Aguilera.
Durante casi 50 años este certamen fue el único a nivel nacional, con una existencia continua de 107 años, hasta 2024. A pesar de que en años anteriores fue suspendido, sobre todo por cuestiones económicas, su permanencia en el tiempo lo ha configurado en el galardón que “toma el pulso” del arte ecuatoriano.
Si se hace referencia a los períodos de suspensión, tal vez el más significativo fue el que se dio entre 1994 y 2002. El último premio que se entregó como Salón Mariano Aguilera, en 1993, fue a una obra efímera de Nancy Vizcaíno, titulada “Ecológico”.
La imposibilidad de almacenarla puso de manifiesto la necesidad de cambios estructurales en el certamen. Así, el Mariano Aguilera se cerró por ocho años para reformularse con una organización acorde con las nuevas tendencias del arte.
La historiadora del arte y curadora María Fernanda Cartagena fue la encargada de esta tarea y, en 2002, se reabrió el Salón de Arte Contemporáneo Mariano Aguilera. En esta nueva convocatoria se incorporaba la apertura a nuevos lenguajes de creación, el registro de las producciones del concurso en un catálogo y la presencia de un curador.
Entre 2002 y 2007, el Salón de Arte Contemporáneo se llevó a cabo levantando controversias en el campo artístico. En el 2008, sin embargo, sucedió algo inédito; a decir de la curadora de esa edición, la colombiana María Iovino, entre las propuestas remitidas no había obra digna de exhibición, por lo que suspendió el certamen.
De esta manera, se volvió a interrumpir el Mariano Aguilera, para repensar nuevamente su estructura. Esta vez se dejó de lado sus vestigios de salón y se lo convirtió en un programa de incentivos para la producción de arte contemporáneo.
Así, en 2011-2012, se abre el Premio Nacional de Artes Mariano Aguilera, cuya nueva estructura trajo algunos cambios importantes, bajo la gestión de las curadoras y gestoras culturales Ana Rosa Valdez, Ana Rodríguez y Ana María Armijos.
El premio ahora es bianual y, en lugar de entregar tres premios y tres menciones de honor, se otorgan 10 incentivos para la producción cultural y un premio a la trayectoria artística. De esta manera, se galardona los procesos y no las obras de arte. Esto permite a los artistas postular con un proyecto que pasa por un comité técnico de preselección, para después ser juzgado por un jurado internacional.
Así, durante un poco más de un año, los ganadores desarrollan su obra, junto a un acompañamiento curatorial proporcionado por el Premio Nacional de Artes Mariano Aguilera. Finalmente, se realiza una exposición con los proyectos terminados y una muestra retrospectiva para el premio a la trayectoria.