Entrevista: Hernán Cueva
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Redactora: Andrea Martínez
Desde 2013 que inició la construcción del Metro de Quito, este 1 de diciembre de 2023 se concreta la obra de movilidad más importante de la capital y del país, dada la magnitud de su construcción e inversión.
Tras la espera de 10 años, todo está listo para que el Metro de Quito inicie su operación comercial, y para contarnos detalles de los retos que enfrentó este proyecto conversamos con Víctor Hugo Villacrés, Gerente del Metro de Quito.
¿Cómo encontró la situación del Metro de Quito, esta nueva administración?
—Días antes de que el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, se posesione en su cargo, se registró una interrupción de las pruebas que se estaban realizando con público de interés y con esquema de pago. La operadora interrumpió el proceso porque sentía que no había la seguridad suficiente para continuar.
Por eso, nos reunimos todos los actores involucrados: el constructor, el operador, el área de licenciamiento del proyecto, la fiscalización, y los multilaterales: el Banco Interamericano de Desarrollo, BID, el Banco Mundial, el Banco de Desarrollo de América Latina, CAF y el Banco Europeo de Inversiones, BEI. Tras 15 horas de trabajo, salió “humo blanco”, se planteó una nueva planificación y salieron a flote muchos elementos que hacían imposible la operación, sobretodo discrepancias en los cronogramas.
El alcalde acogió las nuevas fechas, no sin antes advertir que no se permitirán retrasos ni incumplimientos.
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¿Qué problemas encontraron?
—Entre los nudos críticos, encontramos un sistema de recaudo que no funcionaba, contratos de mantenimiento que no existían, problemas legales con mediaciones; y en la parte logística, una serie de pruebas que no se habían realizado.
¿Cómo se dio solución?
—Arrancamos con el cumplimiento del cronograma. El primer punto fue resolver el sistema integrado de recaudo. Para esto se creó un laboratorio de pruebas en la estación de la Universidad Central, juntando la experiencia del sector público y la academia para empezar a probar medios de pago con QR físico y electrónico. Entonces, decidimos pensar en una Tarjeta Ciudad que brinde amplias posibilidades de transaccionalidad.
Luego de varias reuniones, surgió también la idea de darle un uso al chip de la cédula de ciudadanía. Iniciamos las pruebas con el Registro Civil y otras instancias, con éxito. Además, decidimos hacer un convenio de adhesión con las instituciones financieras para ayudarnos en el método de pago y aceptaron.
Todo este proceso nos dio como resultado una Tarjeta Ciudad a costo cero, que se entregaron desde el 18 de noviembre; y una tarjeta con la cédula de identidad, con convenio de adhesión con el sistema financiero a costo cero.
Con este proceso, descubrimos que el Metro de Quito también es una oportunidad de generar inclusión financiera dirigido al 40% de ciudadanos que viven en la capital que aún no está bancarizado. Esto se da porque todo queda atado a la Cuenta Ciudad, la cual se puede abrir a través de cuatro estaciones habilitadas: Labrador, Quitumbe, Iñaquito y San Francisco.
Además, puedes abrir tu Cuenta Ciudad y registrar tu cédula; a su vez, puedes crear tu cuenta en www.metrodequito.gob.ec, en la pestaña Quito se mueve.
Al final, quienes se registren tendrán una cuenta donde está su dinero, pero con diferentes formas de pago.
¿Cómo funciona esta Cuenta Ciudad?
—El dinero no está atado a la cédula ni a la tarjeta, sino a la Cuenta Ciudad. Se deposita un monto, el mínimo es de USD 3 para aperturar la cuenta, y puedes usarlo cuando necesites.
Incluso podrás descargar la App Metro de Quito y obtener un QR para usar este sistema sin imprimir ticket.
¿Qué pasa con quienes no se registren?
— También pueden comprar su ticket físico en las paradas. Tenemos máquinas ATM que funcionan con USD 0,45 justos. Te entregará un ticket para pasar por las máquinas validadoras.
Pero motivamos a que la gente cree su Cuenta Ciudad para desahogar las filas que se forman en este tipo de transporte y puedan pasar de forma rápida. Al momento, tenemos 160 mil cuentas ciudad habilitadas y aspiramos llegar a 200 mil para que entren directamente al sistema.
Creemos que el Metro de Quito es la oportunidad para que la ciudad pase de lo analógico a lo digital. En 150 días hemos logrado resolver estos inconvenientes, que no eran un problema menor.
En resumen, ahora estamos listos con todos los medios de pago: Cédula de ciudadanía, Tarjeta Ciudad, App Metro de Quito y Ticket físico en paradas.
¿Qué pasó con respecto a los trenes?
—En los aspectos legales, el material rodante (trenes, repuestos, etcétera) no fue recibido por el Municipio, sino entregado en una notaría por la inestabilidad en la parte política del Municipio. Con la venia del Concejo Metropolitano, entramos a mediación en la Procuraduría General del Estado. Los 18 trenes del Metro estaban aquí pero no se habían probado, estaban empolvándose. En esa mediación, recibimos la aprobación para ponerlos a punto, revisar cada unidad con el fabricante, y realizar dos pruebas: la terminación por parte del constructor y la marcha en blanco que simula un proceso de operación, pero sin personas.
Una vez recibido el material rodante, se debía ingresar al registro de bienes del Municipio para asegurarlos. Luego del acta de entrega y recepción, procedimos a asegurarlos.
¿De los 18 trenes, cuántos y cómo estarán operativos?
—Para la operación comercial plena que inicia el 1 de diciembre, saldremos con 16 trenes, ocho en sentido norte sur y viceversa, dos quedarán en cocheras, uno para atender emergencias y uno por mantenimiento, proceso que será rotativo y de carácter preventivo.
Todos los trenes están ubicados en talleres y cocheras en Quitumbe. A las 5h00, ocho de ellos van a salir hacia El Labrador, de tal forma que desde ese sector puedan salir trenes cada cinco minutos desde las 5h30. Lo mismo desde el sur.
El Metro de Quito operará de 5h30 a 23h00 en horario ininterrumpido, y las 15 estaciones estarán habilitadas y funcionando.
¿Cómo será la inauguración?
—Haremos una inauguración simbólica con la ciudadanía. En cada una de las estaciones, el primer usuario cortará la cinta y se la podrá llevar como recuerdo.
Mientras tanto, el alcalde y yo estaremos en el Puesto de Control Central desde las 5h00 para verificar el correcto funcionamiento de las 15 estaciones, en tiempo real.
¿Cómo debe prepararse la ciudadanía para este nuevo sistema?
—En estos últimos días hemos profundizado la Cultura Metro, que en resumen es el manual de uso de este medio de transporte. Incluye reglamentos de usuario, facilidades para las personas con discapacidad, políticas cero acoso, y protocolos de seguridad que incluye a diferentes instituciones como policía, bomberos, ministerios y secretarías municipales.
Ha sido un trabajo de hormiga pero estamos listos, y ahora es la etapa de transmitirle al ciudadano certezas de cómo moverse en el Metro.
¿Cuál es la normativa básica?
—Por ejemplo, en Metro siempre nos movilizamos por el lado derecho; los ascensores son de uso exclusivo para personas con discapacidad y para quienes transporten bicicletas y scooters; las mascotas, de máximo 10 kg de peso, pueden movilizarse en kennel; entre otros detalles que se irán socializando para cuidar el Metro como si fuera una extensión de nuestro domicilio, porque a la final es un medio de movilidad que nos permite ahorrar tiempo y transportarnos con facilidad en la ciudad.
Nos interesa mucho trabajar en la experiencia del usuario porque queremos que su viaje sea inolvidable y que lo sigan usando.
¿Y en seguridad?
—Contamos con alrededor de ocho protocolos de seguridad. Entre ellos, el de validación de entrada y salida. Sabremos qué ciudadano está en el Metro, en qué estación se subió y dónde se bajó.
El sistema tiene instaladas alrededor de 700 cámaras, en estaciones, túneles y trenes, con la finalidad de identificar qué pasa con cada ciudadano. También incluimos botones de pánico en cada uno de los coches (6 en cada tren), así como en las estaciones para alertar situaciones de acoso sexual, vandalismo o robo.
Tendremos guardias de seguridad privada en las 15 estaciones; sistema de conectividad PETRA (en subterráneo) y una red Wifi solo para seguridad y será utilizada por Policía Nacional y personal del Metro.
Además, Metro de Quito se reserva el derecho de admisión. No podrá ingresar quien ha sido observado en flagrancia en delitos de robo, hurto, o acoso sexual.
Sin temor a equivocarme, es el sistema más seguro que tiene el Ecuador para viajar en términos de transporte público.
¿Qué lecciones te ha dejado este proceso?
—La labor de un funcionario público es brindar el servicio a la ciudadanía con un mayor alcance y para eso hemos sacrificado incluso a la familia. Ha sido un “tiempo de locos”, pero agradezco que las cosas han fluido por llevar a cabo este hito importante para la ciudad.
Como dato curioso, también hay coincidencias. El primer sistema de Metro de Sudamérica se inauguró un 1 de diciembre de 1913, en Buenos Aires. Ellos recordarán esta fecha con un saludo especial al Metro más joven, el de Quito.
El Metro ha sido un torbellino de emociones a tope, pero en términos generales, estamos en piloto automático para su inauguración.