Medir el azúcar en la sangre, también conocido como glucosa en sangre, es una práctica importante para evaluar y monitorear la salud. Hacer este monitoreo puede ayudar a retrasar o prevenir las complicaciones de la diabetes, como ataques al corazón, derrames cerebrales, enfermedades de los riñones, ceguera y amputaciones. Incluso, es importante que la mujer embarazada lleve un control adecuado, con el afán de detectar a tiempo posibles problemas de diabetes gestacional.
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En caso de presentar alguna complicación de salud, su médico de cabecera le indicará cuándo y con qué frecuencia se debe revisar el nivel de azúcar en la sangre.
El glucómetro: ¿cómo funciona?
El glucómetro es un medidor del nivel de azúcar en la sangre, el cual permite leer la cantidad de glucosa mediante una pequeña muestra de sangre, por lo general esta muestra se obtiene de la punta del dedo, la cual colocas en una tira reactiva desechable.
Los más modernos te permiten guardar los resultados en una aplicación de teléfono celular para darle seguimiento a sus niveles. Por el contrario, también puede llevar un registro diario por escrito.
El médico te indicará cuál sería un rango adecuado de glucosa sanguínea en tu caso, con base en varios factores:
- Edad
- Tipo y nivel de gravedad de la diabetes
- Período de tiempo en el cual has tenido diabetes
- Estado del embarazo
- Detectar complicaciones de la diabetes
- Salud general y presencia de otras enfermedades
Algunas personas tendrán objetivos de glucosa sanguínea un poco más altos, entre estas se encuentra:
- Personas con 60 años o más
- Personas con enfermedades del corazón, pulmones, riñones, etc.
- Personas que tienen una capacidad reducida para percibir los niveles bajos de glucosa sanguínea (desconocimiento de la hipoglucemia)
¿Qué es la hipoglucemia y la hiperglucemia?
La hipoglucemia (niveles bajos de azúcar en la sangre) es un problema grave, especialmente para las personas que toman medicamentos para la diabetes. Medir los niveles de azúcar en la sangre ayuda a evitar episodios de hipoglucemia y a tomar medidas para elevar los niveles de azúcar si es necesario.
En cuanto a la hiperglucemia (niveles elevados de azúcar en la sangre), puede ser peligrosa y provocar síntomas como fatiga, sed excesiva y micción frecuente. Es por eso que el monitoreo es primordial.