La Felicidad Interior Bruta (FIB) en Bután ha sido proclamada como un elemento central de la vida en el país.
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Bután, Bhutan o Druk-Yul es una monarquía constitucional de las más jóvenes del mundo, enclavada entre los dos gigantes asiáticos, China e India, en plena cordillera del Himalaya.
La historia del pequeño país guarda ciertas similitudes con otros países de Asia del Sur con influencias tibetanas, como Nepal. Alberga una población de casi 800.000 habitantes.
El país ha sido bautizado como una “economía de la felicidad”, “el país más feliz del mundo”, e incluso se ha asociado con el paradisíaco Shangri-La de James Hilton.
Intelectuales como Jeffrey Sachs, Joseph Stiglitz o el expresidente francés Nicolás Sarkozy han puesto el foco de estudio en Bután y su novedosa concepción del desarrollo en torno al concepto de Felicidad Interior Bruta (FIB).
¿Qué hacen los budistas para ser felices?
El budismo Mahāyāna, del que después surgiría la corriente de budismo Vajrayāna esotérico, es la religión oficial en Bután desde principios de los años 1970 y está enraizado en la tradición del país al menos desde que es país (siglo XVII).
La filosofía de la FIB son, entre otras, el buen uso del tiempo, la intensidad de las relaciones sociales, o la diversidad y capacidad de resiliencia ecológica. La FIB entiende que la felicidad se halla no sólo en la satisfacción de las necesidades materiales, sino también en la satisfacción de un tipo de necesidades inmateriales que se refieren a la libertad, la estabilidad emocional o psicológica y la identidad.
El país más feliz del mundo
En el ranking del World Happiness Report, publicado por la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible, Finlandia volvió a ocupar el primer lugar en el top de los países más felices del mundo.
¿Cuál es el secreto? La felicidad finlandesa puede atribuirse a varios factores, uno de ellos, y el más popular entre los habitantes de este país, es la conexión con la naturaleza y sus actividades al aire libre, ya que tienen la suerte de que más del 90% de su territorio está cubierto de bosques o reservas de agua.
Se puede que al pensar en Finlandia lo primero que se nos venga a la cabeza es el frío y la oscuridad que impera durante buena parte del año, porque el sol no sale hasta media mañana y se pone ya al principio de la tarde, pero más allá de los tópicos típicos existe una cantidad de matices que convierten al país escandinavo en un lugar especial. Su abrumadora naturaleza, los niveles bajos de contaminación, la educación, su sistema de salud, los servicios sociales, la libertad, la igualdad o la generosidad de sus habitantes son algunos de los aspectos que lo convierten en el país más feliz del mundo.
A pesar del entorno, los ecuatorianos se consideran “felices”
En un entorno frágil como el de hoy en día, con una población golpeada económicamente, además de los problemas de inseguridad, los ecuatorianos nos auto proclamamos “ciudadanos felices”. En un sondeo realizado por Ipsos en Ecuador en el que se encuestaron a más de 700 personas conectadas se descubrió que el 81% de ecuatorianos manifiestan sentirse muy felices con sus vidas en la actualidad.
Estos datos varían de acuerdo a la generación a la que pertenecen los encuestados. Así como también varían las fuentes de felicidad que los llevan a esta declaratoria Salud, bienestar físico y mental, seguridad personal y otras variables son las que evaluamos en este estudio.
Por ciudad, según el estudio de Ipsos, Guayaquil es la más feliz con el 81.3%; seguido de Quito, con el 80,8%. En cuanto a las generaciones, los millenials son los más felices, con el 85,6%; le sigue la generación X con el 78,7%; loa baby boomers, con el 76,2 % y la generación Z con el 75,4%.
¿Qué le produce felicidad a los ecuatorianos?
Según la encuesta, al 76% le produce mayor felicidad contar con salud mental y bienestar.
Las generaciones más jóvenes consideran que las principales fuentes de felicidad serían: contar con un trabajo que les permita desarrollarse profesionalmente y su seguridad personal.. Mientras más adultos son los ecuatorianos empiezan a priorizar su salud mental, física, familia (hijos) y el querer sentir que su vida tiene un sentido.
Mientras más jóvenes son los ecuatorianos, consideran que el tener más dinero, sus pasatiempos e intereses, tener acceso a actividades de ocio & deportes y tener tiempo para redes sociales les brindaría mayor felicidad.