Se define como huella de carbono al volumen de gases de efecto invernadero que produce el ser humano en sus actividades económicas y cotidianas. Siendo estos gases uno de los principales componentes del cambio climático, reducirlos es apostar por el ambiente, por el planeta y por la vida. Y en este tema el mundo atraviesa una revolución en la que cada granito de arena cuenta. Ecocopter sabe eso y apuesta por una aviación ‘verde’ a través de un plan que ejecuta en los tres países en los que opera —Chile, Ecuador y Perú— y que implica la reducción y el uso responsable de combustibles, para bajar su propia huella de carbono.
PUBLICIDAD
Esta empresa, operadora de helicópteros, lo aplica en todos sus vuelos de transporte de mercancía y de pasajeros. La huella de carbono generada por cada vuelo será compensada con bonos de carbono de proyectos forestales o de producción de energía limpia en la región. Es decir, para quien contrate con Ecocopter, la huella de este vuelo estará neutralizada.
Todo comenzó en Chile, donde se aprobó el programa ‘Vuelo Limpio’, del cual Ecocopter es parte. Luego, la empresa decidió llevar el mismo plan que diseñó hacia Ecuador y Perú. Por ejemplo, una de las cosas que hace en beneficio del cliente y el medio ambiente, para realizar este control, es planificar adecuadamente desde dónde volar, para ser más eficientes en tiempos de vuelo y, por ende, en consumo de combustible.
‘Vuelo limpio’ es una iniciativa público/privada que busca diseñar e implementar un programa de aviación sustentable en Chile, liderado por la Agencia de Sostenibilidad Energética de Chile (AgenciaSE) y apoyado por la Junta de Aeronáutica Civil. La finalidad es mejorar la eficiencia del transporte en la aviación civil, promoviendo buenas prácticas en materia de gestión energética por parte de las aerolíneas y empresas aeronáuticas. Ecocopter es la primera operadora de helicópteros que ingresó en este programa.
Uno de los pilares de Ecocopter es precisamente ser partícipes del cuidado del planeta; y la empresa se ha impuesto el desafío de alcanzar la sostenibilidad de sus operaciones y avanzar en los próximos años hacia la utilización de energías limpias, libres de emisiones.
Ahora, la empresa está impulsando esta misma práctica en Ecuador de manera acelerada. En una primera etapa, el programa debe levantar una línea base de consumo de combustible asociada a cada vuelo, y generar así indicadores, tales como litros de combustible por pasajero-kilómetro o emisiones de gases de efecto invernadero. Esto permite conocer en detalle la actividad aérea nacional y promover la toma de decisión efectiva e informada en términos de tecnologías y buenas prácticas de ahorro de combustible y eficiencia energética.
Además, se busca además impulsar la utilización de tecnologías más limpias, como los combustibles de aviación sostenible y el hidrógeno verde (H2V), además de desarrollar pilotos de eficiencia energética en la industria aérea.
PUBLICIDAD
Ecocopter vuela en Ecuador hace más de tres años, pero tiene una trayectoria de 20 en la región. Comenzó en Chile, y luego en Perú, con la industria del turismo y los sectores estratégicos. Y en el país hacen transporte de pasajeros y carga; pero también colaboran, por ejemplo, en labores de rescate.
Esta preocupación por el planeta no es nueva. Desde hace años, la empresa trabaja en temas ambientales. Todo su personal es capacitado en planes ambientales, en la filosofía ambiental de la compañía; por eso el nombre: Ecocopter. La ecología es un pilar para sus directivos. “Siempre estamos trabajando en bajar nuestra huella de carbono, en controlarnos; sabemos que se usan combustibles, así que hay que estar siempre pendientes”, declaró a la revista NUMBERS Gustavo Junovich, CEO de Ecocopter Ecuador.
En el país, Ecocopter está aprobada por la Dirección de Aviación Civil para hacer transporte de pasajeros y carga, levantamiento geofísico. Incluso pueden hacer evacuaciones aeromédicas de emergencia. Así que están empeñados en demostrar que el éxito económico y empresarial no tiene por qué estar reñido con el planeta; y les gusta pensar que ese es su principal valor agregado.
