El glaucoma es conocido como “el ladrón silencioso de la vista”, ya que con frecuencia pasa desapercibido en sus primeras etapas, no presenta signos de aviso como dolor o malestar y tiene síntomas visuales casi imperceptibles al inicio de la enfermedad, pues la pérdida de la visión se produce en las zonas periféricas de la vista, pero como nuestro sistema de visión binocular es eficaz, permite que el ojo menos afectado compense los defectos del otro y no notamos ningún cambio, hasta que ya es tarde.
PUBLICIDAD
¿Cómo se diagnostica el glaucoma?
El Dr. Javier Aguirre, oftalmólogo del Hospital Metropolitano, nos cuenta que esta patología habitualmente se detecta en una revisión oftalmológica de rutina y no necesariamente porque el paciente haya notado algún síntoma que lo indique.
“Un control oftalmológico debe incluir una medida de la presión intraocular, así como una evaluación del nervio óptico, sobre todo cuando existen factores de riesgo como la edad o antecedentes familiares” comenta el Dr. Aguirre.
No hay una prueba única para determinar si tiene glaucoma o si está en riesgo de desarrollarla. Existen varios exámenes, sin embargo, las dos más frecuentes y de rutina son: la tonometría y la oftalmoscopia.
¿Cómo prepararse para su chequeo oftalmológico?
Los exámenes de rutina que se realizan para conocer el estado de la vista no son incómodos ni causan dolor. Es importante que si usa lentes los lleve con usted para conocer si están funcionando bien. Además, el Dr. Aguirre, recomienda que si se va a realizar el chequeo por primera vez, vaya acompañado de una persona, ya que algunos de estos exámenes requieren gotas para dilatar la pupila, con el objetivo de evaluar el fondo del ojo, la retina, el nervio óptico, entre otras; y esto puede dificultar la visibilidad por algún tiempo hasta que la pupila vuelva a la normalidad.
También hay que tomar en cuenta que antes de hacerse una tonometría se aplica algunas gotas anestésicas en los ojos. Para una medición precisa, respire calmadamente varias veces, antes de apoyar la barbilla y la frente en el tonómetro. Respire con normalidad. No aguante la respiración, ya que esto puede producir una medición más alta de la presión real.
Después de su examen…
Recuerde que es importante preguntar a su oftalmólogo los hallazgos, posibles tratamientos y cómo prevenir futuras enfermedades.
El servicio de Chequeos Médicos del Hospital Metropolitano es completo y cuenta con evaluaciones en más 4 especialidades, incluyendo oftalmología. Además, el Hospital Metropolitano cuenta con el equipo, de última generación, para diagnóstico preciso de su visión.