El nuevo hogar del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tendrá también dos integrantes más, sus perros Major y Champ marcando el regreso de una larga tradición: la presencia de amigos peludos de cuatro patas a la finca de 7,3 hectáreas.
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Donald Trump, mandatario saliente de los EEUU, fue el primer presidente desde Andrew Johnson en la década de 1860 en no compartir la residencia presidencial con una mascosta, ni siquiera con un mapache, como el que tenía Calvin Coolidge en la década de 1920, marcan los historiadores.
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Major, será el primer pastor alemán, rescatado en vivir en la Casa Blanca. Los Biden lo adoptó en noviembre de 2018 de la Asociación Protectora de Animales de Delaware. Minetras que, Champ, también pastor alemán, se unió a la familia en 2008.
«De cachorro rescatado en la Asociación Protectora de Animales de Delaware a transformarse en el Primer Perro en la Casa Blanca, Major Biden demuestra que todos los perros pueden vivir el sueño americano», dijo el grupo, que organizó una recaudación de fondos de «investidura perruna» en línea el 17 de enero para celebrar la mudanza del can a la Casa Blanca.
Con estas dos grandes mascotas, la Casa Blanca gana dos perros, pero, la esposa de Biden, Jill, ha insinuado que posiblemente y en un futuro un gato llegue a esta, su nueva casa.
