¿Cómo saber si mi perro tiene o tendrá cáncer?

Según el estudio algunas razas de perro son más propensas a desarrollar cáncer que otras. Los Golden Retrivet, Labradores y Boxers son algunas de las más propensas a adquirir la enfermedad. El estudio aseveró que cuan menor tamaño tenga el perro, menor será el riesgo de cáncer.

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Los sinónimas son múltiples, como el aparecimiento de protuberancias en la piel del can, estas pueden ser suaves o duras. Sin embargo, no todos los bultos que le salen a tu mascota pueden ser benignos. Los obsesos, los quistes e higromas, son algunos de los bultos que les salen a los perros sin ser necesariamente malignos. A pesar de ello, hay otros síntomas que se deben tomar en cuenta para dar un primer diagnóstico de cáncer en tu perro. Se recomienda a los dueños que si los indicios de cáncer persisten en tu perro lo lleves de inmediato al veterinario para los análisis respectivos.

Síntomas de cáncer

1. Hinchazón inusuales que no desaparece o crecen .- Acaricia a tu perro tratando de identificar alguna anomalía.
2. Llagas que no cicatrizan. – Esto puede ser un signo de infección, de inmediato el can debe ser llevado a un veterinario.
3. Pérdida de peso y apetito. – Esto puede ser señal de que el sistema inmunológico de tu perro está fallando.
4. Sangrado.-, El sangrado puede ocurrir por varias razones. Como síntoma de cáncer se presenta junto otras anomalías como vómitos y diarreas.
5. Cojera persistente. – La cojera es puede ser producto del avance del cáncer. Hueso y músculos se ven afectados.
6. Dificultades para respirar, orinar o defecar.- estos síntomas causan gran dolor al animal deben ser tratados de inmediato.

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Examen de laboratorio para detectar el cáncer

El médico veterinario es el único que puede detectar con precisión si tu perro tiene o no cáncer. Los tumores malignos suelen ser más veloces en su desarrollo que los tumores no malignos que crecen lentamente. Para determinarlo el veterinario realizará pruebas que consisten en mirar las células con un microscopio para comprobar si son normales o no. Las pruebas más comunes son la citología y la biopsia. La primera consiste en la toma una pequeña muestra para su análisis, es un examen sencillo. Mientras que la segunda, consiste en cortar parte del tumor para su posterior análisis. Esta prueba es mucho más fiable que la citología.