La discusión para fijar el Salario Básico Unificado (SBU) de 2026 arrancó este martes sin un consenso entre los sectores convocados. La sesión, liderada por el ministro de Trabajo, Harold Burbano, reunió a representantes sindicales y empresariales en el Consejo Nacional de Trabajo y Salarios. Sin embargo, la cita concluyó rápidamente y sin una cifra acordada.
Por un lado, el sector empleador planteó un incremento de USD 8, argumentando condiciones económicas que, según sus voceros, requieren prudencia para no afectar la sostenibilidad productiva.
En el otro extremo, los trabajadores presentaron una propuesta de USD 20, asegurando que se trata de un planteamiento técnico basado en los indicadores expuestos durante la reunión. Edwin Salazar, primer vicepresidente de la CUT, sostuvo que su propuesta tiene sustento en las variables económicas y sociales que afectan a los hogares ecuatorianos.
Qué pasa si no hay acuerdo antes del 20 de diciembre
De no alcanzarse una resolución conjunta hasta el 20 de diciembre, la decisión final recaerá en el Ministerio de Trabajo, tal como ha ocurrido en años anteriores. Frente a ese escenario, el ministro Burbano adelantó que el incremento podría fijarse en un rango de USD 11 a USD 15, cifra intermedia entre las posiciones planteadas por los dos sectores.
El funcionario explicó que se realizó un ejercicio técnico basado en el artículo 118 del Código del Trabajo, el cual orienta la metodología para determinar el aumento salarial. “Les he planteado a ambos sectores un análisis técnico y humano”, señaló, insistiendo en que las propuestas presentadas se encuentran dentro de parámetros razonables.
Perspectivas para un posible acuerdo
Aunque la primera reunión terminó sin resultados concretos, Burbano calificó el encuentro como productivo, destacando que las posiciones no están tan alejadas como en años anteriores. “No hay una diferencia extrema entre los rangos propuestos. Creo que en la siguiente reunión, o máximo la próxima semana, podríamos tener una definición”, aseguró.
Actualmente, el salario básico se sitúa en USD 470, por lo que cualquier incremento tendrá un impacto directo en más de medio millón de trabajadores que reciben este ingreso. Las próximas sesiones serán decisivas para determinar si 2026 tendrá un aumento consensuado o uno impuesto por la autoridad laboral.