Durante el último feriado por las fiestas de Quito, agentes de Tránsito y fiscalizadores de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) identificaron a un conductor que manejaba en evidente estado de embriaguez en la terminal terrestre de Carcelén.
El hecho ocurrió el domingo 7 de diciembre, en medio de un operativo de control para unidades de transporte interprovincial.
El chofer dio positivo en la prueba de alcohotest con un resultado de 1.78 g/L, por lo que fue aprehendido de inmediato. El límite para un conductor profesional es de 0.1 g/L.
El hombre estaba a bordo con pasajeros y pretendía ir a Loja.
Sanciones:
La AMT indicó que el chofer del bus enfrentará severas sanciones por haber manejado bajo los efectos del alcohol.
El hombre enfrenta 90 días de prisión, la pérdida de 30 puntos en la licencia y la retención del vehículo por 24 horas, sanciones contempladas en la normativa vigente.
Controles reforzados en la capital
Entre el 4 y 7 de diciembre, la AMT ejecutó operativos en toda la ciudad.
En las terminales terrestres se fiscalizaron 5.920 unidades de transporte público: 300 fueron autorizadas para operar y 620 quedaron suspendidas.