Lo que debía ser una tarde de entrenamiento terminó en tragedia. Liam, un niño de 12 años, falleció tras sufrir un derrame cerebral provocado por los golpes recibidos durante una pelea clandestina en un gimnasio ubicado en San Miguel del Común, al norte de Quito.
De acuerdo con los informes preliminares, el menor fue golpeado en la cabeza por un adolescente de 17 años durante un combate organizado sin control técnico ni medidas de seguridad. El gimnasio, el único de la comuna, fue clausurado el 29 de octubre por el Municipio y la Comisaría de Policía al no contar con los permisos de funcionamiento ni condiciones adecuadas.
Lo que se sabe del propietario del gimnasio
El propietario del gimnasio habría huido del lugar durante el operativo. Según moradores, el hombre —originario de Guayllabamba— residía desde hace más de dos décadas en el sector y antes de la pandemia transformó una tienda de víveres en un centro de entrenamiento.
Incluso, habría pedido a los padres firmar autorizaciones que eximían al propietario de toda responsabilidad en caso de accidentes durante combates privados. Además, habría denuncias del trato violento y humillante del instructor hacia los menores que entrenaban en el lugar.

Investigación en curso
La Fiscalía General del Estado mantiene abierta una investigación previa para determinar responsabilidades penales por la muerte de Liam. Según los familiares, se prevé que en las próximas semanas se realice la reconstrucción de los hechos.
Por su parte, Edwin Chicaiza, líder zonal de la Agencia Metropolitana de Control (AMC), confirmó que el establecimiento no contaba con licencias ni medidas de seguridad como extintores, registro de alumnos o personal médico. “En caso de peleas entre menores, debía estar presente un médico y un deportólogo”, precisó.
Mientras tanto, la comunidad de San Miguel del Común lamenta la pérdida del niño y exige justicia por un hecho que, 11 meses después, sigue dejando más preguntas que respuestas.

