El brutal triple crimen de Brenda del Castillo, Morena Verri y Lara Gutiérrez en Florencio Varela de Argentina reveló un nivel de violencia extremo y una metodología que ha conmocionado al país.
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Según las investigaciones, un jefe narco peruano utilizó una transmisión en vivo por redes sociales para mostrar cómo torturaba a las jóvenes antes de asesinarlas y descuartizarlas.
“Así le va a quien me roba”: mensaje del capo narco
Durante la noche del viernes y la madrugada del sábado, los miembros de la banda se conectaron a la cuenta del jefe narco, quien ordenó que comenzaran las torturas.
La frase que pronunció el criminal, “Así le va a quien me roba”, se convirtió en un escalofriante símbolo de la violencia con la que operaba la organización.
La investigación apunta a un joven de 23 años, de origen peruano, identificado como“Pequeño J” o “Julito”, quien sería el cabecilla de la organización narco responsable del crimen.
Al menos 35 personas se conectaron a la transmisión en vivo donde Pequeño J como una forma de “disciplinar” a sus lugartenientes y consolidar su poder mediante el terror.
Autopsias de las chicas:
Según las autopsias, Lara, de apenas 15 años, fue mutilada: le cortaron los cinco dedos de la mano izquierda y una oreja antes de ser asesinada con una puñalada en el cuello.
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Brenda y Morena, ambas de 20 años, también fueron brutalmente torturadas: Brenda recibió puntazos, golpes y finalmente le quebraron el cuello; Morena fue golpeada y aplastada en la cabeza.
Detenciones y allanamientos en villa Zavaleta
La policía bonaerense realizó allanamientos en la villa Zavaleta, que permitieron la detención de ocho personas, presuntamente integrantes de la organización criminal responsable del asesinato de las tres jóvenes.
Hasta el momento, suman 12 los detenidos, incluyendo a los primeros cuatro sospechosos vinculados directamente al homicidio en la vivienda de Jáchal y Chañar, Florencio Varela.
Una de las mujeres detenidas relató a las autoridades que los asesinos, de nacionalidad peruana, habían alquilado su casa para cometer el crimen.
La motivación habría sido la venganza por el robo de cinco kilos de cocaína que una de las víctimas habría tomado de un narco con base en la villa 1-11-14.
La desaparición y hallazgo de los cuerpos
Lara, Brenda y Morena desaparecieron el viernes pasado en la rotonda de La Tablada. Cámaras de seguridad las registraron subiendo a una camioneta Chevrolet Tracker blanca en el cruce de Crovara, entre Bufano y El Tiburón.
Cuatro días después, la policía encontró sus cuerpos descuartizados y enterrados en el fondo de la vivienda ubicada en Jáchal y Chañar, a 37 kilómetros del último lugar donde habían sido vistas con vida.
Redes sociales como herramienta de terror
Este caso no es aislado. Las investigaciones indican que el jefe narco utilizó la transmisión en vivo para enviar un mensaje de terror a sus subordinados, mostrando lo que le ocurre a quienes le “roban” o traicionan. Hace tres años, otro grupo de narcotraficantes recurrió a las redes sociales para transmitir cómo mutilaban al encargado de un búnker en la villa Sarmiento, San Martín.
El uso de redes sociales como herramienta de violencia refleja un patrón de control y miedo dentro de las organizaciones criminales, lo que representa un desafío adicional para las fuerzas de seguridad.
Venganza narco como móvil del crimen
Según fuentes de la investigación, la venganza por droga y dinero es el principal móvil detrás del triple homicidio. La saña con la que las jóvenes fueron torturadas antes de ser asesinadas demuestra que los responsables buscaban no solo eliminar a las víctimas, sino también enviar un mensaje intimidatorio a su red de subordinados y rivales.