El pasado 26 de julio, un hecho violento sacudió a la ciudad de Manizales, Colombia. Silvana Torres, una joven madre de 20 años, fue detenida por presuntamente asesinar a su hija de 2 años, Antonella. El caso ha causado conmoción nacional no solo por la gravedad del crimen, sino por los testimonios de vecinos que aseguran que nunca imaginaron un desenlace como este.
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Magola Valencia, vecina y amiga cercana de Silvana, contó en el programa Testigo Directo que la madre confesó su acción tras una ruptura sentimental. “Ella confesó que lo hizo porque el viernes había terminado con una pareja que tenía. No era el papá de la niña”, relató.
Valencia recordó a Silvana como una joven aplicada y dedicada: “La conozco desde los 14 años. Era estudiosa, siempre quiso darle lo mejor a su hija. Me dejó muy triste la noticia, no sé qué le pasó en ese momento”.
Según los relatos recogidos por el programa, los vecinos reaccionaron con ira al conocer lo ocurrido. Algunos intentaron linchar a Silvana, lo que obligó a la Policía a intervenir para evitar mayores agresiones.
“Estaba con muchas cosas encima. Nada justifica eso, pero creo que fue un momento en que se le nubló la mente”, dijo otra de las testigos.
Otra residente, identificada como Luisa, afirmó que nunca escuchó gritos ni evidencias de violencia intrafamiliar. “Ella era una madre amorosa. Nunca vi nada que hiciera pensar en esto. Amaba a su hija y se esforzaba por ella”, señaló.
El caso está siendo investigado por las autoridades judiciales. Silvana Torres fue imputada por el delito de homicidio agravado, cargo que no aceptó en la audiencia preliminar. La fiscalía continuará reuniendo pruebas para esclarecer el contexto completo del crimen.
Mientras tanto, la comunidad de Manizales permanece consternada, intentando entender cómo una mujer considerada “una madre ejemplar” por quienes la conocían, pudo estar involucrada en un hecho tan trágico.