A pocos días del fallecimiento de Ozzy Osbourne, sus hermanas Jean Powell y Gillian Hemming han compartido conmovedores detalles sobre sus últimos momentos con el legendario vocalista de Black Sabbath, a quien ellas recuerdan no como una estrella mundial, sino como “nuestro John”.
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Ozzy falleció el martes 22 de julio de 2025, a los 76 años, en su residencia Welders House en Buckinghamshire, Inglaterra. Aunque lidiaba con el Parkinson y múltiples cirugías, su muerte tomó por sorpresa incluso a su familia. “Estaba frágil, pero aun así fue un shock”, confesó Jean, de 85 años.
El homenaje íntimo a su hermano
Jean y Gillian se quedaron despiertas toda la noche recordando al hombre que fue parte fundamental de sus vidas. Lo describieron como “cariñoso y divertido” y aseguraron que, a pesar de la fama, nunca dejó de ser el mismo.
“Era simplemente nuestro John. Nos hacía reír a carcajadas. Eso es lo que siempre recordaré”, dijo Jean en entrevista con The Mirror.
Ambas revelaron que mantenían contacto constante con él.
“No podemos creer que ya no recibiremos llamadas ni mensajes. De seis hermanos, solo quedamos tres: yo, Gillian y nuestro hermano Paul”, compartió con tristeza.
El último mensaje de Ozzy
La última vez que supieron de él fue la noche del 5 de julio, justo después del concierto de despedida en el estadio Villa Park en Birmingham. Desde su automóvil, Ozzy le escribió a Jean un mensaje que hoy guarda como un tesoro:
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“No puedo creer que tantas personas caminaran por nuestra antigua calle para verme actuar. Estaba impresionado”.
“Me dijo que tenía muchas ganas de volver. Esperábamos verlo esta semana”, recordó Jean.
Un concierto para la historia
El evento titulado Back to the Beginning reunió a más de 42,000 fanáticos y fue la primera vez en casi dos décadas que Black Sabbath tocaba con su formación original: Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward.
Sentado en un trono negro decorado con un murciélago, símbolo eterno de su carrera, Ozzy interpretó sus clásicos con emoción.
“Es la última canción de todas. Su apoyo nos ha permitido vivir un estilo de vida increíble. Gracias desde el fondo de nuestros corazones”, dijo al cerrar la noche.
Desde un palco privado, Gillian no pudo contener las lágrimas.
“Cuando vi a esa multitud esperando para ver a nuestro John, me quebré”.
Una pérdida inesperada
La mañana del 22 de julio, su estado de salud se deterioró repentinamente. Una ambulancia aérea fue enviada desde la base de la RAF Benson hasta su residencia. Aterrizó en un campo cercano alrededor de las 10:30 a. m. Los paramédicos estuvieron con él durante dos horas, pero no lograron salvarlo.