Un ciudadano que trabajaba como guardia de seguridad en el Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre fue aprehendido la madrugada del domingo 20 de julio, acusado de sustraer pertenencias de los usuarios del servicio de carga internacional.
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La Policía Nacional, a través de su Dirección Nacional de Investigación de Policía Judicial, logró identificar al presunto implicado tras una serie de denuncias de robo de mercancía, presentadas por usuarios y respaldadas por el área de seguridad del Tababela Cargo Center.
Modus operandi: perfilar, sustraer y esconder
Según la investigación policial, el guardia —identificado como Carlos S., de 27 años, de nacionalidad ecuatoriana— habría aprovechado su rol operativo para revisar, manipular y perforar cajas que contenían mercancía importada. Una vez extraídos los objetos de valor, se ocultaba entre la carga hasta no ser visible, luego ingresaba al baño y escondía lo sustraído en una mochila personal.
Pruebas y allanamiento
La conducta fue captada por cámaras de seguridad internas, lo que permitió activar un equipo especializado de seguimiento. Tras el registro corporal al sospechoso, se le encontraron en su poder:
- 01 celular
- Documentos de identificación
- Una mochila con varias prendas de vestir y equipos electrónicos sin justificación

Carlos S. confesó que no actuaba solo. Mencionó a otro guardia de seguridad como su cómplice, quien tenía almacenada mercadería robada en su domicilio, en el sector de Puembo. Allí, los uniformados hallaron:
- 06 laptops
- 01 tablet
- 38 celulares
- 26 accesorios electrónicos
- Varias prendas de vestir

Todos los indicios fueron ingresados con cadena de custodia en el Centro de Acopio de la Policía Judicial del Distrito Metropolitano de Quito.
Situación legal
El ciudadano fue puesto a órdenes de la autoridad competente. No registra detenciones anteriores, pero la investigación continuará para determinar su vinculación con otros posibles robos dentro del aeropuerto.
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Contexto
Este hecho revive las alertas sobre el control de seguridad privada en zonas críticas como la transferencia de carga aérea. Usuarios afectados habrían reportado pérdidas en sus envíos durante al menos tres meses.
La Policía Nacional aseguró que mantendrá operativos preventivos en coordinación con el aeropuerto para evitar que este tipo de delitos queden en la impunidad.