El propietario del colegio bilingüe Brisas, donde estudian niños de preescolar, primaria y secundaria, fue detenido por agentes de la policía al descubrirse que había instalado cámaras dentro de los baños.
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Todo se conoció luego de que alumnas de primaria y de secundaria encontraron cámaras ocultas en las cestas de basura que se encontraban sobre las tazas sanitarias de una quinta donde el detenido solía invitar a los alumnos.
Al ser interrogado por padres y elementos de seguridad, el hombre alegó que lo hacía por la seguridad de los alumnos y que ese material se borraba constantemente.
El sujeto, de 73 años, identificado como Jorge Alonso Carrillo Guajardo, fundó la institución junto a su esposa María Eugenia Caballero en el año 1971, según cita la página web del plantel ubicado en Puerto Marina, Monterrey, al norte del país.
Esposado y detenido
La Fiscalía informó que Carrillo Guajardo “fue detenido en flagrancia por oficiales de la corporación Fuerza Civil, fue puesto a disposición del Ministerio Público por probable delito de pornografía”. Durante la confrontación con los padres de los estudiantes, no fue coherente con las explicaciones sobre la seguridad dentro del colegio.
Hubo padres que le insistían en que está prohibido grabar a personas dentro de los espacios sanitarios, y deploraban que tenían niñas estudiando en la institución desde la primaria. En un momento de la discusión, que fue grabada, se observaba la preocupación de los representantes por el hallazgo de las grabadoras en áreas prohibidas.
El hombre solo decía que era “normal” y que el material grabado era eliminado, a lo que le cuestionaban que estaba viendo a las niñas en áreas privadas, por lo que la fuerza civil y Fiscalía iban a catear su casa y el colegio en busca de evidencias que lo inculpen por delitos relacionados con pornografía o explotación sexual en contra de menores.
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La fiscalía precisó que el propietario “permanece detenido en el término legal correspondiente para determinar su situación jurídica”.
“Allá hay mucha inseguridad”
Los hechos ocurrieron en una quinta campestre, ubicada en el municipio se Santiago, donde los alumnos festejaban el día del estudiante.
En desarrollo
Varios medios, como El Financiero transcribieron el interrogatorio que se le hizo al sujeto, que vestía ropa playera y no parecía indignado por las acusaciones.
“(Son) por seguridad de los niños”, argumentaba el dueño...
-”¿Seguridad de qué? replicaron los padres ¿Qué haces con todas esas grabaciones?”, insistieron.
-”Todas las cámaras todo el tiempo están grabando los salones y los pasillos”, indicó el dueño del colegio...
-”¿Pero los baños qué?”, insistieron los padres.
-”No, no, allá (en la quinta) porque hay mucha inseguridad”, precisó el medio.
Mientras dure la investigación, el colegio permanecerá cerrado.
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