Es normal que los niños no sepan controlarse y carezcan de paciencia. Por ello, es tu deber como padre enseñarle a ser más comprensivo y a entender que no puede conseguir todo en el justo momento que lo pide.
En ese sentido, la cuenta de Instagram Instituto para padres, especializada en crianza y paternidad, nos ofrece las siguientes recomendaciones para ayudar a nuestros pequeños a ser pacientes y tener así control sobre sus impulsos.
¿Qué puedo hacer para que mi hijo aprenda la paciencia como virtud?
- Muéstrale los posibles beneficios de regular sus impulsos; si desea jugar, pero tiene tarea que hacer, dile: si empiezas tu tarea ahora, habrá tiempo para jugar o ir al parque cuando termines. De esta manera, tu niño podrá ajustar sus conductas, tomando en cuenta los beneficios que podría obtener de ella.
- Involúcralo en juegos y actividades que ejerciten la paciencia: como hacer cerámica, sembrar plantas o los juegos por turnos, en los que necesariamente tiene que esperar. De esta forma, tu hijo de manera divertida, ejercita su paciencia.
- Enséñalo a no interrumpir las conversaciones: esto le ayudará a entrenarse en la paciencia y control de impulsos; además, es una regla básica de educación, así que es muy importante que la aprenda a temprana edad, de lo contrario se convertirá en un niño irrespetuoso de las normas de cortesía.
- Enséñale estrategias de afrontamiento: le puedes decir que mientras espera puede hacer algo que le agrade, como dibujar, leer un cuento o jugar con sus juguetes.
- Hazle esperar cada vez que sea necesario: si tu hijo te pide una golosina o un helado, le puedes decir que se lo darás después de los alimentos o el fin de semana.
